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Rosmeri Alfaro
@DiarioCoLatino
El ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya, expuso que el país ha incrementado sus gastos, como cualquier otro, debido a la pandemia de COVID-19, por lo que urge contar con los fondos gestionados por el Gobierno y ratificados por la Asamblea Legislativa.
El Ejecutivo ha gestionado con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), un crédito por $250 millones para financiar diferentes acciones “en favor” del sector Salud, Agrícola y empresarial. Además, de un monto destinado a las municipalidades y una contrapartida de $55 millones para FOMILENIO II.
Zelaya advirtió que el país está a menos de una semana de perder los fondos FOMILENIO II, si los legisladores no se ponen de acuerdo. La fase de ejecución del programa vence el 8 de septiembre.
“Hemos ido a presentar préstamos a la Asamblea con tasas de interés bastantes bajas (…) Hemos sido responsables con el financiamiento que buscamos, porque ha sido con intereses bajos y a plazos favorables, no obstante, la Comisión de Hacienda y Especial de Presupuesto solicita nuevas reuniones en las que piden explicaciones sobre los gastos, pero al final solo quieren hacer perder el tiempo”, indicó el ministro, quien explicó que la deuda de país es del 70 % respecto al Producto Interno Bruto (PIB).
Cabe destacar que, de acuerdo con la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (FUSADES), contener el aumento de la deuda pública es una condición necesaria para “mejorar la precaria situación fiscal, agravada por la pandemia”.
Aseguró que el financiamiento aprobado y el golpe económico debido al confinamiento, ocasionará un peligroso incremento en la deuda, y alcanzará 92.6% del PIB.
Presentar un presupuesto general de la nación para 2021 coherente con el nuevo proceso de consolidación fiscal y atenuar el endeudamiento, utilizando una parte de los créditos gestionados durante 2020; son algunas de las recomendaciones de la fundación.
