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El Ministro de Relaciones Exteriores, mind Hugo Martínez, junto al secretario de Gobernabilidad y comisionado de Seguridad, Franzi Hato Hasbún, presentó a miembros del cuerpo diplomático y representantes de organismos internacionales las medidas extraordinarias en materia de seguridad pública que impulsa actualmente el Gobierno de El Salvador.
Durante la conferencia, el ministro Martínez reiteró el compromiso del Gobierno del presidente Salvador Sánchez Cerén de promover y defender los derechos humanos, por lo que las medidas excepcionales relacionadas a la seguridad estarán sujetas a la legislación del país, “y que bajo ninguna circunstancia se permitirá un patrón de violaciones a los derechos humanos”, reiteró.
Por su parte, el secretario Hasbún se refirió a las medidas extraordinarias destacando que se ha decidido declarar estado de emergencia en siete centros penales del país donde están recluidos pandilleros de alta peligrosidad sobre quienes se reforzará el control y la interrupción de su comunicación con el exterior para evitar que estos cabecillas de pandillas continúen ordenando la comisión de homicidios y extorsiones.
El secretario Hasbún detalló que también se pretende descongestionar el sistema penitenciario con beneficios a personas que padecen de enfermedades terminales o de avanzada edad y habilitar centros temporales de reclusión, entre otras acciones, y enfatizó que las medidas anunciadas forman parte del Plan El Salvador Seguro y que convocarán al Consejo Nacional de Seguridad y Convivencia para obtener los consensos necesarios para más medidas que esperan implementar a corto plazo.
La propuesta de medidas extraordinarias para reforzar la seguridad, tendrá una duración de un año, y fueron presentadas a la Asamblea Legislativa este jueves. Se espera que sean aprobadas este día.
De acuerdo al ejecutivo, estas disposiciones tienen por finalidad adecuar la infraestructura, asegurar la eficacia del sistema y proteger a la población de manera permanente de las acciones delictivas que se originan desde los centros penales.
A la vez, garantizar seguridad y tranquilidad a todas las familias salvadoreñas, a través de la implementación de medidas urgentes de carácter extraordinario, las cuales permitirán un combate más efectivo contra la criminalidad.
Perspectiva de género en las negociaciones
Por otra parte, el Ministro de Relaciones Exteriores, Hugo Martínez, también se reunió con el grupo de amigas y amigos de la Resolución 1325 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y las resoluciones subsiguientes sobre mujeres, paz y seguridad, y reiteró el compromiso del Gobierno del Presidente Salvador Sánchez Cerén con la implementación de acciones para lograra la plena vigencia de la resolución 1325.
La Resolución 1325 enfatiza el papel que desempeñan las mujeres en la prevención y resolución de los conflictos, al tiempo que llama a la incorporación de una perspectiva de género en las negociaciones y acuerdos de paz, además de las operaciones de mantenimiento de paz en el mundo.
El grupo de amigas y amigos está conformado por representantes de la embajada Británica, Chile, España, Estados Unidos y Francia; Onu Mujeres, Instituto Holandés de Democracia Multipartidaria, la Organización Católica de Ayuda Humanitaria y Desarrollo (CORDAID, por sus siglas en inglés), además del Instituto Salvadoreño para el Desarrollo de la Mujer (ISDEMU) y la Cancillería por medio de la Dirección de Desarrollo Social Integral.
Entre los logros alcanzados, mencionó la conformación del Comité Nacional de Implementación de la Resolución 1325 que ha sido respaldada por Decreto Ejecutivo, la realización del Taller Regional de Formación sobre la Resolución 1325, en agosto pasado, y la presentación del informe de cumplimiento de los 15 años de adopción de la Resolución 1325, realizado en septiembre de 2015 ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
Además, el jefe de la diplomacia expresó su confianza en que se “logren avances sustantivos en este tema que debe ser puesto de manifiesto por los gobiernos como un paso necesario para el desarrollo igualitario de nuestros países de cara al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y de la dignidad humana de nuestras niñas, mujeres y adultas mayores”.
La resolución 1325 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas fue aprobada por unanimidad el 31 de octubre de 2000, abogando por la adopción de una perspectiva de género que incluye las necesidades especiales de las mujeres y las niñas durante la repatriación y reasentamiento, la rehabilitación, la reintegración y la reconstrucción postconflicto.
