Joaquín Salazar
@JoakinSalazar
Condenan bloqueo a trabajo periodístico. Edison Lanza, Relator Especial para la libertad de expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) cuestionó al presidente Nayib Bukele por no permitir el acceso a tres periodistas a una conferencia de prensa el pasado vienes.
“El día que el Presidente de El Salvador, Nayib Bukele, presenta comisión para investigar corrupción con la Organización de Estados Americanos (OEA), Casa Presidencial impide acceso de El Faro, uno de los principales medios de investigación”, dijo Lanza ante las acciones de elementos de seguridad de Casa Presidencial.
Y es que el pasado viernes, pese a que se presentaron a la hora de la convocatoria de Casa Presidencial, a los periodistas del periódico digital El Faro y la Revista Factum no se les permitió el ingreso, por supuestas directrices del gobierno del Presidente Bukele. Dicha decisión no ha sido bien vista a nivel internacional, ni organismos de derechos humanos en El Salvador.
Víctor Peña y Gabriel Labrador de El Faro no se les permitió el acceso, además de Fernando Romero de la Revista Factum. Para Lanza, los “Gobiernos deberían ser neutrales frente a línea editorial de los medios”.
De igual manera, Angélica Cárcamo, presidenta de la Asociación de Periodistas de El Salvador (APES), condenó los hechos perpetrados por Casa Presidencial.
“Desde APES condenamos cualquier restricción al ejercicio periodístico. Esta no es la primera vez que denuncian a los equipos de comunicaciones de la Presidencia por realizar acciones de bloqueo a medios como El Faro y la Revista Factum”, dijo la dirigente de la APES.
Asimismo, Cárcamo expresó su preocupación, ya que el gobierno de Bukele estaba firmando un convenio de cooperación con la OEA para la creación de la Comisión Internacional Contra la Impunidad de El Salvador (CICIES), bloqueando el trabajo periodístico en temas contra la corrupción.
De igual manera, la Procuradora Para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH), Raquel Caballero, pidió al presidente Bukele que “de inmediato reconsidere su posición respecto de ambos medios; y que, en aras de nuestros avances democráticos y de la libertad de expresión que estamos logrando, se deponga cualquier actitud reñida con tales principios democráticos, a la mayor brevedad posible”, dijo.
Además, pidió que se dé cumplimiento a una de las garantías constitucionales del artículo seis de la Constitución de la República, que establece el derecho a la libertad de expresión y de la información.
“Me solidarizo con El Faro y la Revista Factum, y con todos los medios democráticos, nacionales e internacionales, cualquiera que sea su línea de pensamiento, en ocasión de los actos discriminatorios de que han sido objeto, sin importar las causas que se aduzcan para ello”, enfatizó la procuradora.
“Víctimas”
De forma sarcástica, el presidente de la República, Nayib Bukele, aseguró que los periodistas de la Revista Factum y El Faro “se están haciendo las vístimas”. A la vez compartió el comunicado de la Secretaría de Comunicaciones de la Presidencia, en el que se reitera que es respetuoso de la profesión periodística.
“Desde el primer día he sido cercano y accesible con todos los medios de comunicación, nacionales e internacionales”, dicta el comunicado. Asimismo, afirmó que durante los 100 primeros días de gobierno ya van más de 25 conferencias de prensa emitida por él.
De acuerdo al escrito, en la última conferencia de prensa del gabinete de salud un periodista de El Faro “irrumpió en el evento con gritos sin motivo alguno y sin control. Este mal comportamiento no ha sido el único, ya que en otra conferencia de prensa también se tuvo un hecho similar con un periodista de la Revista Factum, quién se dirigió de manera irrespetuosa y petulante al personal de Casa Presidencial”.
Ante esta situación, CAPRES explica que existen protocolos y procesos que deben respetarse no solo por la institución en la que se encuentran, sino por respeto a los demás profesionales del periodismo.
“Ni el presidente Nayib Bukele, ni la Secretaría tienen la intención de restringir o afectar la libertad de expresión, al contrario este gobierno es consiente de la importancia de los medios de comunicación para informar a los salvadoreños, sobre el trabajo del aparato estatal”, señala el escrito.