Redacción Nacionales
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El expresidente de la República, Mauricio Funes, se refirió a las recientes reformas que Nuevas Ideas y aliados aprobaron en el congreso, para penalizar con cárcel a los medios de comunicación que reproduzcan mensajes alusivos a pandillas, con esto se “criminaliza a la prensa”, pues corta la libertad de prensa sobre el informar sobre el tema de las pandillas, detalló el exmandatario.
“La prensa escrita, radial, televisiva y digital elaboran y trasmiten mensajes que hacen alusión a grupos delincuenciales. Esta formulación genérica da a lugar a que si a juicio de la FGR o la PNC, periodistas o un medio de comunicación están reproduciendo o transmitiendo mensajes alusivos a grupos delincuenciales, entonces le va a caer una pena de 10 a 15 años de cárcel”, reprochó Funes en entrevista en redes sociales con Raúl Palacios.
“No se trata de una simple ley mordaza, se trata de la criminalización de la actividad periodística que al Gobierno de Nayib no le conviene o no están de acuerdo con esa labor periodística”, destacó Funes. Pues una ley mordaza prohíbe, pero con estas reformas sanciona penalmente.
El exmandatario ejemplificó que cuando los medios de comunicación especialmente El Faro, Revista Factum, y otros medios tradicionales realizan sus investigaciones y hacen alusión a grupos de pandillas, ”¿entonces, le van a aplicar una sanción de 10 a 15 años?, ¿a quién van a meter preso, al dueño del medio, al representante jurídico del medio, al periodista que ha elaborado la información o al presentador del medio?, me parece que es una formulación muy general, pero a la misma vez, muy peligrosa”.
“¿Qué periodista se va a atrever a llevar a cabo una investigación sobre las pandillas y publicarla?, si corre el riesgo que lo metan preso de 10 a 15 años”, planteó Funes.
En ese sentido, Funes razonó que las reformas van encaminadas a que posibles negociaciones entre el Gobierno con las pandillas no salgan a la luz pública, así como presuntas irregularidades dentro de los Centros Penales como la aparente liberación de líderes de pandillas.
En otro punto, Funes se refirió sobre la orden de construir otra cárcel de máxima seguridad con capacidad para 20 mil pandilleros, situación que contrasta con los anuncios hechos años atrás, pues Nayib Bukele aseguró que iban a cerrar tres prisiones ubicadas en zonas urbanas para su demolición y posterior construcción de una infraestructura cultural y educativa. Se trata de los centros penitenciarios situados en Sonsonate, Metapán (Santa Ana) y en La Unión.
“Estamos hablando de la cárcel más grande de El Salvador, pero ¿de dónde va a sacar el dinero?, si construir una cárcel no es solo de soplar y hacer botellas ¿quién va a poner esos recursos, de dónde sacará esos recursos, si no tiene para cerrar la brecha fiscal?”, cuestionó Funes.
El exmandatario concluyó que el Plan Control Territorial ha sido un fracaso, ya que según citó datos que en su momento han sido manejados por medios, en la actualidad existen 85 mil pandilleros activos en el territorio, pero en el Gobierno de Salvador Sánchez Cerén la cifra era un poco más de 60 mil. “Eso significa entonces que en tres años de Gobierno de Nayib Bukele ha habido un incremento de 20 mil nuevos pandilleros que se encuentran el territorio, entonces ¿cuál es el éxito del Plan Control Territorial?”.