@RosmeriAlfaro
Garantizar la seguridad alimentaria y nutricional (SAN) de la población, es uno de los principales retos a los que se enfrentan algunos países a nivel mundial.
La Encuesta Nacional de Salud 2014 realizada por el Ministerio de Salud (MINSAL), a través del Instituto Nacional de Salud (INS) reveló que la desnutrición crónica en menores de 5 años disminuyó un 29.17%, pasando de 19.20% en 2008 a 13.6% en 2014.
Mientras que el primer Censo Nacional de Talla y Peso en escolares de primer grado, señala una reducción del 41.94% de la desnutrición crónica en escolares, bajando de 15.5% en 2007 a 9% en 2016.
De acuerdo con el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) se cerró el año 2016 con optimismo por los niveles de producción alcanzados en los ciclos agrícolas, como la cosecha de 26.7 millones de quintales en granos básicos, a pesar de las situaciones climatológicas.
Para 2017, según datos de la encuesta de expectativas de producción, realizadas por la Dirección General de Economía Agropecuaria del MAG, se espera una producción de 2.9 millones de quintales de frijol; 20.1 millones de quintales de maíz, 3 millones de quintales de sorgo y 700 mil quintales de arroz. “Estas cifras garantizan que para el año 2017 la población salvadoreña dispondrá de la cantidad necesaria para suplir las necesidades de consumo y contar con estabilidad en los precios”, indicó el MAG.
Según Milton Recinos, miembro del Frente Nacional Agrario (FNA), esa cosecha es necesaria para surtir el mercado interno del país y no permitir que haya un alza en los precios.
En 2016, el MAG entregó a los productores un total de 564,249 paquetes de granos básicos para garantizar la seguridad alimentaria de la población: 145,263 de frijol; 525 de frijol-humedal; 415,932 de semilla de maíz; 2,446 de maíz-humedal y 83 de sorgo.