Alma Vilche
@AlmaCoLatino
El historiador nacional y escritor, Carlos Gregorio López Bernal, presentó el libro “Gerardo Barrios entre el mito y la historia: El Salvador siglo XIX y XX”, donde el autor desafía las narrativas tradicionales que lo han catapultado como un héroe nacional, a la vez, invita a los lectores a una reflexión más matizada y profunda sobre uno de los personajes más emblemáticos de la historia salvadoreña.
López Bernal presenta a un Gerardo Barrios verosímil, egocéntrico, con luces y sombras, anclado en la historia y no por encima de ella, desmiente falsedades y cuestiona mitos, revelando cómo las élites han manipulado relatos e históricos en su favor. El libro destaca como desde finales del siglo XIX, diversas publicaciones y biografías han perpetuado un discurso con una visión idealizada y acrítica de Barrios, omitiendo un análisis profundo de su vida y contexto. La publicación deja de lado las leyendas heroicas tejidas alrededor del caudillo liberal. Mediante una exhaustiva investigación, invita a reflexionar sobre la historia oficial y el poder de la narrativa en la formación de identidades.
“En el siglo XIX en la zona oriental, del río Lempa hacia allá, era una región económicamente muy pujante, pero también tenía mucha importancia política. San Miguel era un mega departamento, sobre todo en las dinámicas políticas porque en ese entonces había un departamento que prácticamente contenía una tercera parte del territorio del país”, indicó López.
En aquellos tiempos las ferias comerciales eran todo un acontecimiento donde la actividad económica se dinamizaba y las hacían justo en la época donde las cosechas habían salido, principalmente el añil y cereales.
El historiador narró que a la feria llegaban comerciantes de diferentes partes del mundo, de la región centroamericana, pero también de Europa, esos comerciantes venían a llevarse el añil, pero traían otros productos al mercado nacional, aquí jugó un importante papel el puerto de La Unión, que era el único.
Asimismo, detalló que Barrios sacó una vida política larga y turbulenta. En ese tiempo la política se hacía de dos maneras, por la vía legal constitucional y también por la forma no legal, que implicaba una serie de maniobras incluso la amenaza del uso de la fuerza. Gerardo Barrios no tiene una carrera militar al menos no como es conocida hoy día.
“Cuando decimos carrera militar estamos pensando en un oficial que entra muy joven a la escuela militar, se forma y sale con el grado de subteniente, luego entran a servicio y van haciendo su carrera y ganando el grado máximo. En el siglo XIX para empezar no había escuelas militares, por eso no podemos encontrar jefes militares que no sean oficiales de fila, así como fue Gerardo Barrios”, sostuvo en la entrevista Encuentro con Julio Villagrán.
Según el historiador, el grado más alto que Barrios ostento fue de capitán general, el cual era dado en los tiempos coloniales, cuando el país era parte de la monarquía española; un capitán general en una república era complicado, sin embargo, en ese entonces fue considerado como válido y se le otorgó.