Rosmeri Alfaro
@DiarioCoLatino
La Cámara de Comercio e Industria de El Salvador (CAMARASAL) llamó a los políticos a “tener un sentido de urgencia” en apoyar a la micro, pequeña y mediana empresa, que ha reportado pérdidas de hasta el 75 % durante la pandemia.
“Sabemos que muchos socios ya no aguantan, están sin recursos y están desesperados por abrir pero no les trae bien a nadie abrir de golpe. Estamos llamando a la gradualidad por sector y una autoregulación”, manifestó el presidente de CAMARASAL, Jorge Hasbún.
El representante de la gremial aseguró: “El sector productivo necesita que se le deje de restar liquidez, con pagos diferidos y otras figuras”; además, necesitan lograr la reinvención de los negocios y la modernización de los sectores, así como la inyección de liquidez.
“Los políticos no han tenido que vivir una situación económica complicada, las empresas sí; es momento de que tengan empatía (…), urge que el fideicomiso se implemente ya”, expuso en una entrevista televisiva.
Cabe mencionar que el Banco de Desarrollo de El Salvador (BANDESAL) trabaja en la gestión de $110 millones de los $600 millones destinados para el Fideicomiso para la Recuperación Económica de las Empresas Salvadoreñas, con el que se busca apoyar a micro, pequeñas y medianas empresas afectadas por la crisis de la COVID-19.
El director Ejecutivo de CAMARASAL, Federico Hernández dijo que la situación de las mipymes es precaria, ya que más del 90 % de los socios de la Cámara advierte que ha sido afectado de manera negativa.
“En efecto, hay micro y pequeñas empresas que, si no han colapsado, están a punto de hacerlo. Uno entiende que la situación está difícil y hay preocupación por llegar a cierta normalidad, pero pedimos gradualidad. Lo peor que le puede pasar a un empresario es que se enfermen en sus colaboradores”, resaltó.
Hernández aseguró que, aunque confía en la capacidad de autoregulación y disciplina que puede tener el sector, ciertamente será necesaria una inyección de recursos. De acuerdo con encuestas de la Cámara de Comercio, el 17 % de las micro y medianas empresas claudicaron durante el cierre económico, el 37 % han estado cerradas y podrían ir a la quiebra técnica en cualquier momento.