Guarjila, una comunidad repoblada de Chalatenango, fue el centro de reunión de personas que conocieron o han escuchado sobre el sacerdote jesuita Jon de Cortina. Este 12 de diciembre se cumplen 12 años de su partida física pero su legado, por el desarrollo de la zona nororiente de Chalatenango y en la búsqueda de niños separados de sus familias por el conflicto, sigue presente y vigente.
Pobladores de Guarjila se juntaron en la Casa Museo Jon de Cortina para iniciar las actividades nocturnas en honor del religioso jesuita. Foto Diario Colatino/Luis Ponce
La memoria de los mártires de la UCA estuvo presente entre los asistentes a la procesión de farolitos.Foto Diario Colatino/Luis Ponce
La luz, tradición en esta celebración, hizo gala en una noche donde recordó el signo de presencia de Cortina entre la gente.Foto Diario Colatino/Luis Ponce
A lo largo del trayecto se reflexionó sobre diferentes temas. Uno de ellos, la necesidad de una ley de reparación para las víctimas del conflicto.Foto Diario Colatino/Luis Ponce
La misa fue presidida por Mons. Oswaldo Escobar, obispo de Chalatenango, acompañado de sacerdotes diocesanos y jesuitas.Foto Diario Colatino/Luis Ponce
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...
Relacionado
Debe estar conectado para enviar un comentario.