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Redacción Nacionales
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En un trabajo conjunto la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Cruz Roja Alemana, con el apoyo financiero de la Unión Europea (UE), implementarán el proyecto “Escalando la acción anticipatoria para hacer frente a la amenaza de la sequía y la inseguridad alimentaria en Centroamérica”, el cual beneficiará a 1,721 personas de los municipios de Chilanga y Guatajiagua, del departamento de Morazán. La acción anticipatoria es un enfoque ampliamente reconocido para proteger las vidas de las personas y los medios agrícolas de subsistencia, se basa en intervenciones de corto plazo con el propósito de mitigar el impacto de una o más amenazas y forma parte del espectro de estrategias en la gestión del riesgo.
El proyecto tendrá una duración de 18 meses, se espera beneficiar a 9 mil personas de Honduras, Guatemala, El Salvador y Nicaragua, cuyo objetivo es la acción local y la preparación para una respuesta eficaz a nivel comunitario, mediante el mejoramiento de las capacidades de las poblaciones de estos territorios, y la promoción del establecimiento de sistemas de acción anticipatoria en coordinación con los principales socios y el gobierno.
A criterio de Xabier Garay, experto en reducción de riesgo de desastres de la FAO para Mesoamérica, la sequía es uno de los mayores riesgos contra los medios de vida y la seguridad alimentaria en el corredor seco centroamericano, la adopción de planes y estrategias de acción anticipatoria a partir de los pronósticos meteorológicos, ayuda a proteger a los pequeños agricultores vulnerables frente a esta amenaza.
Según Mauricio Santos, delegado de proyectos de la Cruz Roja Alemana, a través del proyecto pretenden beneficiar directamente a 9,371 hombres y mujeres del sector agrícola en los cuatro países centroamericanos; además, involucrar a las autoridades locales y nacionales de Gestión de Riesgos de Desastres, Ministerios de Agricultura, servicios meteorológicos, de Seguridad alimentaria y Nutrición (SAN), protección social, sanidad, agencias de la ONU y ONG. El proyecto también apuesta por garantizar la puesta en marcha de mecanismos de promoción, gestión del conocimiento y coordinación con los socios, para promover la recopilación y el análisis de datos oportunos y más integrados, así como orientar la toma de decisiones en función de los riesgos, en apoyo de la acción anticipatoria y la respuesta en el sector de la seguridad alimentaria.
