Redacción Nacionales
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El Ministerio de Hacienda lanzó la fase cuatro del Plan Anti-evasión, con la que se pretende reforzar las acciones conjuntas en el combate a los evasores y los delitos contra el Fisco. El lanzamiento se realizó junto al Gabinete de Seguridad y el fiscal general de la República.
El Plan Anti-evasión se desarrolla desde el año 2019, a través de una política fiscal con énfasis en los ingresos tributarios, “haciendo más eficiente” la recaudación por medio de los Planes Antievasión y Anticontrabando.
La fase cuatro tiene como eje central el trabajo coordinado entre el Ministerio de Hacienda, la FGR, el Gabinete de Seguridad y el Instituto Salvadoreño de Pensiones (ISP), para procesar y judicializar más casos, permitiendo que los evasores paguen todo el dinero “robado”.
En el lanzamiento, el funcionario encargado de las finanzas públicas reveló que enviará a la Asamblea Legislativa una reforma que permitirá catalogar como “insolventes” a todos aquellos empresarios y patronos que no han pagado las cuotas de AFP e ISSS de sus empleados. “Todo esto de la mano con el ISP, el cual iniciará un despliegue territorial para auditar y sancionar a empresas que se roben el dinero de sus empleados”.
El Plan Antievasión y el Plan Anticontrabando han tenido un rendimiento de $1,370 millones aproximadamente desde su lanzamiento, según comentó el ministro de Hacienda.
Zelaya concluyó que El Salvador ha logrado significativos de acuerdo con varios organismos multilaterales, entre ellos la CEPAL, “desde 2021 somos el país que más recaudación tributaria tiene en América Latina respecto a su Producto Interno Bruto”.