Por Jennie Matthew
Nueva York/AFP
La policía halló varios artefactos explosivos en Nueva Jersey, uno de los cuales detonó, informó este lunes el FBI, mientras se investigan tres ataques en suelo estadounidense en 24 horas.
Las autoridades indicaron que no hay pruebas de que los ataques estuvieran coordinados, aunque su ejecución en un lapso de 24 horas plantea temores en materia de seguridad en momentos en que se libra una dura batalla electoral entre la demócrata Hillary Clinton y el republicano Donald Trump.
«Había un paquete sospechoso que contenía varios artefactos explosivos improvisados ayer por la noche en la estación de tren de Elizabeth, Nueva Jersey», tuiteó el FBI, la policía federal estadounidense.
«En el momento de colocarlo a resguardo, uno de los artefactos detonó», agregó, aunque aclaró que nadie resultó herido.
Más temprano, el alcalde de Elizabeth, Chris Bollawage, dijo que dos hombres alertaron a las autoridades tras encontrar a última hora del domingo un paquete con «tubos y alambres».
La policía ya venía investigando una explosión en Manhattan, Nueva York; un ataque con arma blanca en Minnesota, y otra explosión en Nueva Jersey.
Nueva York entró en alerta completa y desplegó más de 1.000 policías estatales y guardias nacionales en aeropuertos, terminales de ómnibus y estaciones de subte, mientras el presidente Barack Obama llegó a la ciudad previo a la apertura el martes de la Asamblea General de la ONU.
Nueva York
Según informes de prensa, cinco personas fueron detenidas el domingo por su posible vinculación con la bomba que estalló la noche del sábado en Chelsea, Manhattan, que causó 29 heridos -que ya fueron dados de alta- y daños en edificaciones.
La policía descubrió una segunda bomba a cuatro calles del lugar del incidente y la desactivó sin problemas, para luego enviarla a la sede del FBI en Virginia para pruebas forenses.
Ambos artefactos, confeccionados con ollas a presión, contenían metralla, teléfonos, luces de Navidad y compuestos explosivos, informó The New York Times a última hora del domingo, citando fuentes policiales.
El periódico también indicó que las autoridades federales había detenido a cinco personas.
La rama neoyorquina del FBI dijo en su cuenta de Twitter que «se detuvo un vehículo que era de interés para la investigación», sin hacer mención a ningún arresto, en tanto añade que «nadie fue acusado de crimen alguno. La investigación continúa».
Medios de Nueva York dijeron que los cinco pasajeros del vehículo quedaron bajo custodia para ser interrogados.
En total, 38 personas resultaron heridas, 29 de ellas en una explosión en la noche del sábado en el centro de Manhattan; y las otras nueve por arma blanca en un centro comercial de Saint Cloud, en Minnesota.
Nueva York entró en alerta completa y desplegó más de 1.000 uniformados en aeropuertos, terminales de ómnibus y estaciones de subte, mientras el presidente Barack Obama llegó a la ciudad previo a la apertura el martes de la Asamblea General de la ONU.
Nueva Jersey y Minnesota
El sábado también explotó en Nueva Jersey una bomba artesanal en un contenedor de basura en Seaside Park, mientras se desarrollaba una carrera del Cuerpo de Marines con cientos de participantes.
El estallido no causó daños pero obligó a suspender la competencia.
El domingo se suspendió el tráfico ferroviario entre el aeropuerto de Newark y Elizabeth tras los informes del hallazgo del paquete sospechoso, indicaron las autoridades.
La ciudad de Elizabeth está relativamente cerca de Staten Island y Verrazano Bridge.
En Minnesota, tuvo lugar un ataque con arma blanca en un centro comercial de Saint Cloud, con saldo de nueve heridos, que fue reivindicado por el grupo yihadista radical Estado Islámico (EI).
El autor del ataque «era un soldado del Estado Islámico, que respondió a los llamados para tomar como objetivo a los ciudadanos de los países miembros de la coalición de los cruzados», indicó Amaq, órgano de propaganda del EI.
¿Acto terrorista?
Las autoridades dijeron carecer de elementos para vincular los ataques de Nueva York, Nueva Jersey y Minnesota, pero sobrevuela la sospecha de que se trató de actos de «terrorismo», doméstico o yihadista.
«Una explosión en Nueva York obviamente es un acto de terrorismo, pero no está vinculado al terrorismo internacional», dijo el gobernador demócrata de ese estado, Andrew Cuomo, el domingo luego de una recorrida por Chelsea tras la explosión.
«En otras palabras, no encontramos una vinculación con el ISIS», agregó Cuomo en referencia al grupo yihadista Estado Islámico (EI).
Bill de Blasio, alcalde de Nueva York, ciudad que desde este lunes acoge a jefes de Estado y de gobierno de todo el mundo para la Asamblea General de la ONU, dijo que «no sabemos la motivación, no sabemos su naturaleza. No sabemos si tuvo una motivación política o si fue una motivación personal».
Nadie reivindicó las explosiones en Manhattan o Nueva Jersey, a diferencia del ataque de Minnesota.
El FBI busca a un naturalizado estadounidense nacido en Afghanistán de 28 años en conexión con las explosiones de Nueva York y Nueva Jersey el sábado.
La policía federal emitió una foto de Ahmad Khan Rahami, buscado para ser interrogado por la bomba que estalló en Nueva Jersey.
El FBI indicó que el último domicilio conocido de Rahami es Elizabeth, ciudad de Nueva Jersey donde se hallaron varios explosivos en la estación de trenes de Elizabeth, cerca del aeropuerto de Newark.
«Referencias a Alá»
Quince años después de los atentados del 11 de setiembre del 2001, las autoridades subrayan que Estados Unidos es mucho más seguro para enfrentar planes terroristas originados en el extranjero, aunque es vulnerable a ataques de «lobos solitarios» inspirados por la propaganda del EI o de Al Qaida.
En Minnesota, el agente del FBI encargado de la pesquisa, Rick Thornton, dijo que «investigamos estos hechos como un potencial acto de terrorismo. Pero remarco que es potencial. Aún hay muchas cosas que no sabemos».
La policía confirmó que el atacante preguntaba a las víctimas si eran musulmanas antes de apuñalarlas, y que «hacía referencias a Alá».
Según el diario local St Cloud Times, el agresor, que fue abatido por un policía fuera de servicio, era un estadounidense de origen somalí de 22 años. Se llamaba Dahir Adan y estudiaba en la universidad local.
Cinco detenidos
Cinco personas fueron detenidas el domingo por su posible vinculación con la bomba que estalló el sábado en Nueva York, que causó 29 heridos y reavivó el tema de la seguridad en la campaña presidencial estadounidense.
El FBI, la policía federal estadounidense, no confirmó las detenciones, anunciadas por varios medios de prensa citando fuentes policiales.
Las detenciones tuvieron lugar, según la prensa, en la víspera del inicio de la Asamblea General anual de las Naciones Unidas en Nueva York.
Según los medios, las cinco personas fueron detenidas cuando circulaban en un automóvil en una autopista del sur de Nueva York.
La agencia del FBI en Nueva York dijo en su cuenta de Twitter que nadie ha sido acusado por esa bomba pero no hizo mención a detenciones.
«Hicimos parar un vehículo que era de interés para la investigación», dice el tuit.
«Nadie fue acusado de crimen alguno. La investigación continúa», añade.
Medios de Nueva York dijeron que los cinco pasajeros del vehículo quedaron bajo custodia para ser interrogados.
Influencia en elecciones
Todos estos incidentes podrían entrar en los debates preelectorales de cara a las presidenciales del 8 de noviembre, para las que Hillary Clinton y Donald Trump acortaron distancias.
El aspirante republicano se solidarizó con las víctimas de Nueva York, con un tuit en el que expresó sus «condolencias y mejores deseos a los familiares y las víctimas de la horrible explosión en Nueva York».
La demócrata Clinton condenó el domingo «los ataques aparentemente terroristas de Minnesota, Nueva Jersey y Nueva York», y aprovechó para recordar que había preparado un plan completo para «vencer al EI y a los otros grupos terroristas».