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Shanghai/dpa
Tras la sorprendente victoria de Sebastian Vettel en Australia, el británico Lewis Hamilton respondió al pulso del alemán con un imponente triunfo en el Gran Premio de Fórmula 1 de China y anticipó que el campeonato del mundo 2017 será uno de los más ajustados de los últimos tiempos.
Tras 56 vueltas plagadas de accidentes, abandonos y adelantamientos, Hamilton se impuso en el circuito de Shanghai a bordo de su Mercedes por delante del Ferrari de Vettel y del Red Bull de Max Verstappen, que remontó 13 posiciones para subir al último escalón del podio.
Así, después de dos carreras disputadas, Hamilton y Vettel están empatados a 43 puntos en lo más alto de la clasificación general. Este año sí parece que Mercedes tendrá un rival con la fiabilidad y la potencia necesaria para disputarle el título, algo que no ocurrió en las últimas tres temporadas.
Hamilton salió desde la “pole position” con su Mercedes y mantuvo el primer puesto a pesar del caos de las primeras vueltas.
El asfalto estaba mojado en el inicio, pero tardó apenas unos minutos en secarse. Además, en la vuelta 2 hubo un “safety car” virtual por un accidente de Lance Stroll y otro choque de Antonio Giovinazzi en el giro 8 obligó al coche de seguridad a salir a pista.
Triple campeón del mundo, Hamilton resistió esos momentos de incertidumbre en los que prácticamente todos los pilotos montaron neumáticos de seco y acabó celebrando su primera victoria del curso y la quinta de su trayectoria en China.
El triunfo incluyó el tercer “Grand Slam” de Hamilton en su carrera, es decir, salir desde la “pole”, ocupar la primera plaza desde la primera hasta la última vuelta y conseguir la vuelta rápida al circuito.
La estrategia también pareció funcionar a Vettel, que entró en el primer “safety car” mientras que Hamilton se quedó en pista.
Pero el inesperado accidente de Giovinazzi fue una bendición para el británico, que aprovechó ese momento para cambiar las ruedas al tiempo que Vettel caía a la quinta posición, por detrás de Verstappen, el australiano Daniel Ricciardo y Kimi Raikkonen.
Adelantó a Raikkonen, su compañero de equipo, en la vuelta 20 y dos giros después rebasó a Ricciardo en una maniobra en la que a punto estuvieron de tocarse. Y en la vuelta 29 aprovechó un error de Verstappen para colocarse segundo.
Quien también se lo pasó en grande fue Verstappen. Salió décimo sexto, adelantó nueve posiciones en la primera vuelta y después superó a Ricciardo y a Raikkonen con sendas maniobras arriesgadas pero que al final le valieron el podio.
Ricciardo (Red Bull) cruzó la meta en cuarto lugar, seguido de los finlandeses Raikkonen (Ferrari) y Valtteri Bottas (Mercedes). El español Carlos Sainz (Toro Rosso) arriesgó con la estrategia y subió cuatro posiciones para acabar séptimo.
El “top ten” lo completaron el danés Kevin Magnussen (Haas) y los dos pilotos de Force India, el mexicano Sergio Pérez, noveno, y el francés Esteban Ocon, décimo.
La escudería McLaren vivió ayer otro domingo para el olvido con el abandono de sus dos pilotos, el español Fernando Alonso y el belga Stoffel Vandoorne.
La tercera carrera de la temporada se celebrará dentro de una semana en Bahréin.
