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Rolando Alvarenga
@DiarioCoLatino
Para el ex campeón nacional y medallista internacional, Héctor Paz, el karate tiene un buen presente de sangre joven y por ende, esperanzas de un buen relevo generacional hacia la alta competencia internacional. Se retiro hace tres años de la selección mayor, pero sigue trabajando en el Centro Denver en la preparación de nuevos prospectos con sueños de tocar las estrellas en las artes marciales.
A su criterio, “la cuarentena vino a cambiar puntos y opciones y la baja de Jorge Merino durante el último año, ha dado la oportunidad de brillar a otros atletas”. Sostiene que en el karate hay recurso humano que no tiene la experiencia, pero le sobran ganas y posibilidades”
Por ejemplo, dice, Alejandro Jurado ha tenido una historia muy similar a la de Jorge, desarrollándose desde las categorías infanto-juveniles y durante los últimos años en mayores. Ha conquistado medalla panamericana y ahora mismo anda en excelente nivel. En el caso de Gabriela Izaguirre ha despuntado muy bien, pero le falta madurar y el carácter analítico para el combate. Mientras, Pedro Recinos ha crecido en los niveles infanto-juveniles logrando muy buenas destrezas técnicas. No obstante les falta pasar por el crisol para pulir sus habilidades.
Con la voz de la experiencia y su ojo clínico, Héctor Paz manifiesta que hay muchos juveniles de gran valía, pero se están juntando en las categorías de pesos inferiores, provocando que las oportunidades sean menores, pero el desarrollo competitivo mayor. Finalmente y sobre Jorge Merino expresa que se trata de un exponente como ninguno en la historia de este país, que ayuda a inspirar y formar a la siguiente generación en un paso natural y cuando se recupere deberá ser fuerte para asumir el liderato de una nueva promoción.
