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Álvaro Darío Lara
Recientemente en el Complejo Escolar Colonia Villa Alegre, Cantón Limón, Soyapango se llevó a cabo un homenaje a los escritores: Amada Libertad (1970-1991), Mauricio Vallejo Marroquín (1958-1981), Mauricio Vallejo Márquez, Coordinador del Suplemento Tres Mil de Diario Co-Latino y a un servidor.
El acto fue organizado por el profesor y escritor Saúl Alfredo Guevara, docente de esa institución educativa y Coordinador de Cultura, y se realizó en el marco del 37 aniversario de fundación del Complejo Escolar, y del reconocimiento del que fueron objeto dos padres de familia, fundadores del centro educativo: don Juan Cabrera Herrera y don José Antonio Alvarado, vecinos del lugar a quienes la institución honró por su dedicación y esfuerzo desde la colocación de los primeros ladrillos de esa casa de estudios.
Fue una mañana muy emotiva, muy fresca y encantadora. Terminado el acto protocolario que contó con la presencia de alumnos, padres de familia, autoridades municipales y de la institución, se procedió a pasar a las aulas donde los alumnos, guiados por el profesor Guevara, expusieron sus trabajos en la asignatura de Lenguaje, consistentes en grandes formatos de álbumes de escritores, donde no fue difícil reconocer a los homenajeados, con su biografía y listado de obras publicadas. Cada niño desde sexto a noveno grado, instruía a los visitantes sobre la vida y producción de los escritores, y además entregaba un tríptico que recogía sus propias creaciones literarias, todo gracias a los talleres que el profesor Guevara, con dedicación y esfuerzo, ha dirigido dentro del centro escolar.
Al azar de los muchos trípticos que nos fueron obsequiados, transcribo el siguiente poema de Mario Josué Hernández Olivares, titulado “Chimbolo”: “Qué bonito chimbolito/ Chiquitito y ojudito/ Come zancudo pequeñito/ Para convertirte en un/ Pez grande/ Gordito y fuerte/ Puede que plateado/ o rojito, pero no/ importa el color/ lo que importa/ es tu amor”.
O este otro de Steven Alexander Rivas Miranda, que bautizó como “Mi papá”: “Hombre de noble corazón/el que nos da protección/ es muy trabajador/ con manos ásperas/es un guerrero/ también un luchador/ que día a día lucha/ debajo del sol y debajo de la lluvia/ para darnos lo mejor”.
De parte de los escritores, representó al desaparecido poeta y cuentista Vallejo Marroquín y al poeta Vallejo Márquez, Patricia Márquez Motto, viuda y madre, respectivamente de los literatos.
Y a la poeta Amada Libertad, el que esto escribe, en representación de la madre de la poeta, profesora Argelia Quintana.
Mucha gratitud y reconocimiento al Centro Escolar Colonia Villa Alegre, a sus autoridades, cuerpo docente y profesor Saúl Alfredo Guevara, por las atenciones recibidas. Muchas gracias a los niños y niñas que con sus cantarinas voces y bellas palabras honraron a los poetas y nos dejaron el grato perfume de sus versos en esa inolvidable mañana.
Gracias querido profesor Saúl, por hacer patente entre nosotros estos versos de la gran poeta chilena Gabriela Mistral, cuando expresó, en su oración al Maestro: “Dame sencillez y dame profundidad. /Líbrame de ser complicado y banal/en mi lección cotidiana. /Que no lleve a mi mesa de trabajo/mis pequeños afanes materiales. /Permíteme que haga de espíritu/mi pequeña escuela de ladrillos”.
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