Tegucigalpa/AFP
Cientos de hondureños y estadounidenses protestaron en la noche del domingo ante la embajada de Estados Unidos en Tegucigalpa, con una vigilia por el apoyo de Washington al presidente derechista Juan Orlando Hernández, declarado ganador de unas cuestionadas elecciones.
«Venimos» ante la embajada de Estados Unidos «a poner luces en medio de la oscuridad de una dictadura que tiene la protección inmediata y permanente de Estados Unidos», dijo a periodistas el director de los jesuitas en Honduras, Ismael Moreno, durante la vigilia.
Unas 200 personas, según estimaciones de periodistas, se concentraron frente al edificio de la misión diplomática con velas y cantando música de protesta, tras ser convocadas por la Convergencia contra la Impunidad.
Los manifestantes gritaban consignas como «Fuera JOH (Juan Orlando Hernández)», y «va a caer, la dictadura va a caer», «asesinos, asesinos». Grupos de policías custodiaban el edificio durante la protesta pacífica.
Miles de hondureños han salido a las calles después de las elecciones del 26 de noviembre pasado, a reclamar la victoria del presentador de televisión, Salvador Nasralla, candidato de la izquierdista Alianza de Oposición Contra la Dictadura.
Los opositores denuncian fraude del candidato del oficialista Partido Nacional (PN, derecha), que fue reconocido por Estados Unidos.
Más de 30 personas han muerto como consecuencia de la represión policial y militar contra los manifestantes, según organismos de derechos humanos.
En un discurso durante la protesta, Moreno acusó al gobierno estadounidense de hablar de respeto a los derechos humanos pero a la vez ser «responsable directo de la implantación de la dictadura de Hernández (…) de los asesinatos y del aplastamiento de la democracia» en Honduras.
Moreno dio la bienvenida a miembros de un grupo de religiosos estadounidenses que se unieron en la oración por la «justicia y por la paz».
La representante de los estadounidenses, Kathleen Mc Tigue, dijo que le daba «vergüenza» el comportamiento de Washington al respaldar a Hernández y prometió llevar ese mensaje a su país.