Diario Co Latino 134 años comprometido con usted
Artículos relacionados
@GloriaCoLatino
La llegada a la Cooperativa La Guacamayera en el municipio de San Alejo, viagra La Unión, pills genera una percepción de tierra árida y difícil para la producción, por el excesivo calor y la reincidencia del fenómeno de El Niño, consecuencia del Cambio Climático mundial.
No obstante, la cooperación japonesa a través de JICA, sus voluntarios y entidades de gobierno, trabajan unidos para apoyar a este grupo de pequeños productores en el cultivo de hortalizas, y en mejorar las capacidades combinando conocimientos y técnicas en el rendimiento de las cosechas.
Hiroyuki Tanaka explicó que este proyecto se enfoca en mejorar la “rentabilidad de los productores de hortalizas” en el oriente del país, reto lanzado el 29 de mayo de 2014, en la que convergen conocimientos y tecnología de la Cooperación Internacional del Japón (JICA) y el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) con 4 años para su desarrollo.
“Queremos que estos asociados (cooperativistas) identifiquen nuevas oportunidades de venta e incluso, damos una pequeña capacitación de como realizar un sondeo de mercado, por cuenta propia, y esto lo distingue de otras iniciativas, porque en la mayoría de estos proyectos son expertos quienes estudian el mercado para informarles a los productores, pero aquí la gente es la que busca su oportunidad”, dijo.
Sobre los avances de este proyecto, hasta el segundo semestre del año 2015, Tanaka agregó que los cooperativistas han aprendido a chequear mercados (precios), buscar nuevos compradores y estudiar los criterios que demandan los comercializadores de las hortalizas como: el tamaño, calidad, frescura o variedad.
Este proyecto de Horti Oriente se ha extendido a Morazán y Usulután, en la búsqueda de aumentar ingresos y mejorar la rentabilidad de los negocios de los productores de hortalizas; para esto se coordinan 50 grupos que trabajen de lleno, en optimizar las cosechas y satisfacer la demanda de los mercados.
“Se escoge a un asociado para un curso de capacitación en Japón, para que aprenda como se comercializa la hortaliza y vea como se crean las sinergias entre compradores y productores, e incluso como se realiza la venta directa o como se controla el precio de parte de los productores”, comentó.
Así también, los cooperativistas han podido asistir a “Encuentros de Agro-Negocios- para conocer en el terreno a proveedores de insumos agrícolas, representantes de agencias financieras, a manera de conocer distintos actores en el campo agro-comercial.
“Aquí (Cooperativa La Guacamayera) se siembra chile … pero a nivel grupal se siembra maíz, frijol, cebollas, sandía, pipián y ejote, entre otras hortalizas”, indió.
Ezequiel Cruz, exbecario de JICA, recibió capacitaciones de como mejorar la producción y vender sus cosechas de hortalizas que les abrió otras puertas para generar ingresos económicos y acrecentar las opciones de venta.
“Nosotros no sabíamos nada del tema de comercializar, y la capacitación allá en Japón nos enseñó a cómo comercializar los productos, y agradecemos al JICA y al gobierno traer esta oportunidad y ahora con el cultivo del chile a través de PRODEMOR, que nos dio las dos “casas maya” que permite que 19 familias luchen para salir adelante”, manifestó.
¿Qué es la Casa Maya?, consiste en una técnica que permite generar un ambiente controlado para que las hortalizas reciban las cantidades adecuadas de agua y nutrientes. El lugar es semejante a un invernadero, pero es una casa cubierta de malla que impide la presencia de plagas que suelen atacar a los cultivos.
“Nunca habíamos sembrado chile verde en la zona, fuimos al sondeo de mercados y nos decían que no creían que en esta zona pudiera sembrarse el chile, pero Gracias a Dios pudimos cosecharlo …estamos aprendiendo a negociar los productos y hemos hecho un plan de acción para organizarnos y comenzar un nuevo ciclo de trabajo y así obtener mejores ganancias. Esto requiere que sepamos cómo y en qué momento sembramos la planta …hasta su cosecha”, enfatizó. Esto, agregó Ezequiel Cruz, les permite muchas opciones para la producción de sus cultivos, mientras que con el manejo del agua, a través de fondos del gobierno y la comunidad, se logró perforar un pozo y contar con agua para el proyecto.
“Es una buena experiencia -antes nosotros- ni sabíamos cuándo se podía vender mejor el producto, ahora sabemos hasta buscar las épocas para comercializar nuestros productos; somos nuevos en el rubro de las hortalizas, pero ahora tenemos la oportunidad de mejorar y buscar nuevos mercados, como los agro-negocios del gobierno que podemos incursionar y estamos buscando la manera de recolectar fondos para construir un solo centro de acopio para comercializar”, puntualizó.
Debe estar conectado para enviar un comentario.