Gloria Silvia Orellana
@GloriaCoLatino
“Estamos en una situación muy grave a nivel mundial a causa de la pandemia, hemos sobrepasado los 10 millones de afectados por el COVID-19 y más de medio millón de ellos han muerto”, dijo en su mensaje dominical, el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas.
Las cifras del sitio covid19.gob.sv reportaron este domingo 9,674 casos confirmados, 260 fallecidos y 3,780 casos activos, de los cuales 657 casos son graves y 319 son críticos. Con una suma de 9,711 casos sospechosos.
“Cada día el número de los contagiados es mayor y también el número de las personas que mueren. Solo el día de ayer (sábado) tuvimos 210 nuevos casos y murieron 10 personas a causa de esa enfermedad. Y de no haber una ley de emergencia que proteja la sociedad el pronóstico para los próximos días, es muy preocupante”, manifestó el jerarca católico.
El prelado católico reiteró que el aumento del contagio tiende a ser “vertiginoso”, sino se declaran nuevas disposiciones incluidas la de restringir la movilidad innecesaria y regulando de manera adecuada la movilidad necesaria.
“Por el bien de todos les pedimos de la manera más respetuosa a las autoridades del Estado, tanto al poder Legislativo, como Ejecutivo, que mediante un diálogo positivo y movidos por el único interés de proteger la vida de los salvadoreños lleguen al acuerdo de aprobar la ley de Emergencia Nacional que más convenga. Este llamado lo hace el arzobispo ante el encaprichamiento de los representantes del Ejecutivo de no acudir a explicar el plan a los diputados, y de estos a no atender el llamado del Ejecutivo.
Asimismo, señaló que la ley de emergencia que necesita el país, debe prepararse de manera urgente y que de una cobertura adecuada a todos y todas las salvadoreñas, a fin de salvar a la nación.
“Se debe salvar al país de una muy probable mortandad y no permita una hecatombe nacional con la pérdida de muchas vidas humanas, debe prevalecer el buen juicio y debe primar la vida, sobre cualquier otro interés. El comercio y la economía no son tan importantes como la salud de las personas”, advirtió el prelado.
El arzobispo Alas hizo una exhortación a todos los poderes del Estado y sectores sociales de la vida nacional a buscar soluciones plenas, que atiendan las necesidades de todos y todas.
“Hay que tomar las necesarias medidas de seguridad sanitaria para proteger la vida de familiares o la vida de las personas que tratamos y nuestras propias vidas. Y les pedimos a todos unirnos en oración suplicando a Dios, que cese la pandemia. Oremos por los enfermos, oremos por quienes los atienden y encomendemos a Dios a todos los difuntos”, puntualizó.