Yaneth Estrada
@caricheop
En la Cripta de Monseñor Romero, el llamado fue a estar unidos en medio de un mundo convulsionado, que anuncia guerras, enfermedades y desesperanza.
Para la Iglesia católica esto es un llamado, así como Simón, Andrés, Santiago y Juan (primeros discípulos) para dejar las redes y ser pescadores de almas, llevando las buenas nuevas del evangelio. “Siendo luz en medio de las tinieblas”.
San Pablo exhorta en nombre de Jesús a no vivir divididos, sino en unidad; y monseñor Romero instó reiteradamente a que no haya división de creencias, porque estorban la evangelización y la unidad entre cristianos. Por eso, en la mesa de ofrendas este domingo se presentaron los Santos Evangelios, simbolizando la fuente de unidad del género humano donde Cristo enseñó a estar unidos para llevar el plan de salvación a todo el mundo.
La unidad entre cristianos
También, monseñor Romero dijo al católico que nadie le puede arrancar su fe en la eucaristía, y sin traicionarla debe buscar la unidad entre cristianos de todas las denominaciones.
El sacerdote Douglas Crespín recalcó que “la liturgia nos invita a reflexionar sobre el inició de la predicación de Jesús, que parte haciendo una invitación a todos, hombre y mujer, para cambiar de actitud, de vida y ser más semejantes a él”.
Lo primero que hace Jesús es llamar a la conversión, esto es lo que produce un acercamiento a Dios, porque no se trata de dejar de hacer algo, sino de dejar de hacer lo malo, y acercarnos a Dios, ser sus servidores.
“Es así como el evangelio nos explica como llama a los primeros cuatro discípulos y los invita a eso, a ser pescadores de almas, a llevar el evangelio. Pero también nos invita trabajar en la unidad de la Iglesia, porque actualmente la Iglesia está siendo muy atacada por las divisiones, y el llamado de Pablo es uno estar unidos en el Señor, como él y la Iglesia son uno”, enfatizó el líder religioso.