Texto: Gloria Silvia Orellana
Fotos: Fernando Velásquez
“Todas las personas son iguales ante la Ley”, reza el lema del monumento en la Plaza La Constitución, una mujer con una balanza y una espada, quien representa la “justicia”, y lejos de esa divisa idílica, las mujeres salvadoreñas enfrentan una situación de violencia, acoso y feminicidios, que las mantiene atrapadas en una sociedad que se nutre del machismo patriarcal.
Morena Murillo (Foro Nacional de Salud y APROCSAL) afirmó que pese a la instalación del Comité nacional para la Implementación de la Resolución 1325, sobre Mujeres, Paz y Seguridad y su plan de acción, hay retrocesos como la inexistencia de un desarrollo sustantivo de la reparación con vocación transformadora para los crímenes contra las mujeres y la casi nula participación de las mujeres en una política de seguridad.
“La actual política de seguridad del actual Gobierno se promueve y se espectaculariza la potencia bélica y militar sobre la ciudadanía civil; como una invitación a mostrar terror, fuera de todo margen de la ley. Un simbólico y perverso retroceso de los Acuerdos de Paz y el sistema democrático que da garantías constitucionales y de nuevo coloca a las mujeres en el miedo y desprotección”, señaló.
Desde 2016, la UE y las embajadas europeas en el país entregan la “Medalla Unión Europea” como un reconocimiento a personas u organizaciones que con sus acciones se han destacado por contribuir al fortalecimiento de las relaciones bilaterales
Según la tradición, esta medalla se entrega en mayo durante la celebración del mes de “Europa en El Salvador”, sin embargo, debido a la pandemia del COVID-19 no se pudo desarrollar.
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