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@JoakinSalazar
La Academia Internacional para el Cumplimiento de la Ley (ILEA) inauguró un taller que busca sensibilizar a los gestores de justicia y seguridad sobre los “Crímenes de Odio”, treatment contra sectores vulnerables de la sociedad.
El curso será impartido por el Departamento de Policía de la Ciudad de Atlanta, click Estados Unidos, con el objetivo de combatir los delitos en contra de personas que pertenecen a determinados grupos minoritarios como racial, religión, origen étnico o nacionalidad, género, edad u orientación sexual.
De acuerdo con la dirección de la ILEA, la capacitación será enfocado principalmente a con el sector de Gays, Lesbianas, Bisexuales,Transexuales, Transgénero e Intersexuales (LGBTI), por ser un sector con mayores índices de crímenes de odio en la región.
Solo en El Salvador se han reportado diez crímenes de odio contra la población LGBTI, entre ellos el reciente asesinato de Francela Méndez, en Sonsonate, quien se dedicaba a luchar por los derechos de la comunidad gay del país.
Bahamas, Barbados, Belice, Costa Rica, Perú, San Cristóbal y Nieves, Trinidad y Tobago y El Salvador, son los países que participan en el curso, con representantes de Jueces, Fiscales y elementos policiales.
“La capacitación que inicia busca que en los aplicadores de la Ley se valore la necesidad de incorporar la atención especial a los grupos que se ven afectados por estas practicas violentas”, comentó Michael Bayer, Director de la ILEA por el Gobierno de Estados Unidos.
Asimismo, Bayer comentó que existe una necesidad de parte de los aplicadores de justicia para que conozcan el tratamiento y abordaje de los casos de crímenes de odio.
La Embajadora de Estados Unidos en El Salvador, Mari Carmen Aponte, recalcó que la sensibilización sobre temas de crímenes de odio son importantes para los aplicadores de la Ley, porque su trabajo debe enfocarse en la defensa de los derechos humanos y no en que pertenece a determinado grupo vulnerable. “La conducta criminal hacia una víctima debido a un prejuicio contra miembros de un grupo social, se trata una modalidad de crimen de lesa humanidad, porque quien lo comete considera que la victima carece de valor humano”, explicó la diplomática estadounidense.
Además recalcó que todos los seres humanos tienen igualdad de derechos, que los gobiernos deben de proteger y respetar.
Según autoridades del ILEA, la metodología para el curso será destinada para que los participantes se dividan en grupos por país, donde se les proporcionará casos de muestra y deberán describir cómo evaluar e investigar escenas del delito en sus respectivos países. Hecho que permitirá exponer las diferentes experiencias de cada país.
Dentro del plan de estudio del curso se desarrollaran temáticas de investigación de delitos de odio y las dificultades que enfrentan los aplicadores de justicia con respecto a dichos delitos.
Uno de los principales fines del Curso es que los participantes que tienen la capacidad de hacer cambios en sus instituciones, velen por replicar y adoptar medidas para el tratamiento de los delitos de odio.
Por parte de El Salvador, en el curso participan miembros del Ministerio de Justicia y Seguridad Pública, Fiscalía General de la República y de la Corte Suprema de Justicia (CSJ).
Las organizaciones que defienden los derechos de las personas LGBTI han denunciado constantemente que las instituciones de justicia y Seguridad no velan por los derechos de dicha población.
Tras el asesinato de la activista Francela Méndez, la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH), ha denunciado que de los diez casos de crímenes de odio contra la población LGBTI cometidos durante este año, ninguno ha sido judicializado, por parte de la FGR.
Ante esta situación diversos sectores civiles consideran necesario realizar cambios en la justicia salvadoreña y tipificar el delito de “crímenes de odio”.
Ayer, el grupo parlamentario del Frente Farabundo Martí para Liberación Nacional (FMLN) solicitó reformas al Código Penal, específicamente el artículo 129, numeral once, para que se tipifique el homicidio agravado cuando sea motivado por odio racial, étnico religioso, político, de identidad de expresión de género y orientación sexual.
