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Por: Rolando Alvarenga
El reciente caso de la experimentada luchadora, Tatiana Portillo, quien quedó fuera de la entrega de estímulos deportivos económicos del INDES, debe llevar a la reflexión con miras a los Juegos Centroamericanos de Santa Tecla.
En el caso de Tatiana, ella pertenece a la lucha olímpica y grecorromana que en juegos del Ciclo Olímpico compite por 18 medallas de oro, plata y bronce; o sea, con tres selecciones de seis atletas de cada modalidad: Libre masculino y femenino, más una en Grecorromana.
De acuerdo al instructivo del INDES y tras recibir el reporte de la FEDELUCHAS, sólo un luchador se hizo acreedor al estímulo económico por haber ganado presea internacional en 2019.
El resto de atletas propuestos quedaron en veremos, debido a que no pudieron agenciarse un metal en alguna competencia internacional.
Por ello, varios luchadores y luchadoras, que tienen cierto nivel centroamericano y hasta panamericano, no recibirán apoyo económico para su trabajo y preparación de este año.
Entonces, con la crisis que se nos viene a raíz del coronavirus, difícilmente este grupo de atletas tendrá recursos financieros para seguir en la Lucha y optarán por el retiro para buscar trabajo o seguir estudiando. En consecuencia, El Salvador podría quedarse sin varios atletas competitivos para los Juegos Centroamericanos de Santa Tecla 2021.
Sin embargo, el INDES podría flexibilizar los requisitos de su instructivo de entrega de estímulos económicos para que así los atletas competitivos -que no lograron recibir el estímulo- no se vean forzados a dar un paso al costado, aspecto que pesaría a la delegación cuscatleca.
