Gloria Silvia Orellana
Redacción DiarioCoLatino
A partir del lunes 8 de abril se reiniciaron las diligencias de exhumación en el plan de Las Aradas, en relación a la Masacre del río Sumpul, ubicado en el cantón Yurique, jurisdicción de Ojos de Agua, Chalatenango, informó Alejandro Díaz, abogado de la Asociación Tutela Legal “Dra. María Julia Hernández”.
La masacre de El Sumpul está registrada en el Informe de la Comisión de la Verdad, una entidad creada tras la firma de los Acuerdos de Paz (1992). En ese entonces recibió 23 mil denuncias documentadas y presentadas a través de instituciones o personas de forma individual.
De esto se recogieron alrededor de 2 mil testimonios directos de testigos relacionados con las 7 mil víctimas causadas por la confrontación interna. Así como, la información de fuentes secundarias que se relacionan directamente a 8 mil víctimas.
Con toda la información se generó en conjunto 13 mil 659 casos documentados. La Comisión de la Verdad seleccionó sólo 32 de estas denuncias, por los antecedentes que mostraban los “patrones de violencia”cometidos durante el conflicto.
En la masacre de El Sumpul, fueron asesinadas más de 600 personas, en su mayoría niños, niñas, ancianos y mujeres que huían de un operativo iniciado el 13 de mayo de 1980, y ejecutado ese 14 de mayo”, Díaz.
“Las víctimas fueron masacrados por la Fuerza Armada de El Salvador (FAES), Fuerza Aérea (FAS), Guardia Nacional (GN/ya extinta), miembros de la Organización Nacional Democrática (ORDEN), y en la que también participó el ejército de Honduras, que desplegó un cordón para que las víctimas no pudieran pasar al territorio hondureño”, declaró Díaz.
Junto a Medicina Legal y autoridades judiciales se han realizado ya, dos exhumaciones anteriores en “pozos”, en donde se encontraron restos de las víctimas que quedaron dispersos en todo el plan de Las Aradas y en los márgenes del río Sumpul, que fueron recuperados por sobrevivientes semanas después del crimen considerado de Lesa Humanidad.
Las víctimas que quedaron en las orillas y el plan de Las Aradas no pudiero ser enterrados, por la presencia de miembros de los ejércitos de El Salvador y Honduras.
“Esperamos encontrar más restos de víctimas y que esto sirva en el proceso judicial que está abierto en el Juzgado Primero de Instrucción de Chalatenango”, acotó el abogado.
La acusación es contra los perpetradores y también el Alto Mando de la Fuerza Armada, que está documentado en este proceso, y lo encabeza el exministro de la defensa, José Guillermo García, que está implicado en otros casos de masacres, así como otros altos mandos que ordenaron y planificaron la masacre del Sumpul, reiteró Díaz.
Asimismo, mencionó la responsabilidad del ejército de Honduras, que meses antes habían realizado reuniones con sus pares salvadoreños para ejecutar este amplio operativo, señaló Díaz, tras reiterar que este constituye en un Crimen de Lesa Humanidad.
El ejército hondureño impidió el paso de las víctimas a su país, ese 14 de mayo, cuando sólo intentaban salvar sus vidas. “El operativo militar salvadoreño se había iniciado el 13 de mayo, con un operativo antiguerrillero. Las tropas salieron desde diversos puntos y fueron convergiendo sobre el caserío de Las Aradas, situado a las orillas del Sumpul”, dice el Informe de la Comisión de la Verdad.
“Este crimen de Lesa Humanidad, que todavía está impune y que lamentamos que hasta la fecha no se haya llevado a juicio a estos militares, que se les haya intimado, que se les haya procesado y ordenado captura, ya que está totalmente comprobada la masacre”, indicó.
La masacre del río Sumpul está comprobada, existe el cuerpo del delito que se maneja en el Derecho Penal, o sea, con la recuperación de los restos de las víctimas, más las amplias y abundantes declaraciones y testimonios que están incluidos en el proceso y, a 44 años de ocurrido sólo podemos exigir justicia, reparación y dignificación de las vícitmas, puntualizó Alejandro Díaz.