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Redacción Nacionales
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El presidente del partido Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), Carlos Saade, dijo a través de un video que en los últimos días la INTERPOL ha confirmado que “en El Salvador existe persecución política”, haciendo referencia a la negativa de ubicar y capturar al expresidente de la República, Alfredo Cristiani, quien lleva procesos judiciales en El Salvador.
El fiscal general de la República, Rodolfo Delgado, dijo en una entrevista televisa que avisaron a la INTERPOL para que procediera a ubicar a Cristiani. “Esa es otra situación que nosotros estamos luchando con las autoridades de INTERPOL, precisamente porque en algunas de estas investigaciones nos han señalado que son casos políticos”, comentó Delgado.
Saade, por su parte, dice que el presidente de la República, Nayib Bukele “y sus secuaces” buscan denigrar a todos aquellos rostros dentro de la oposición “para tapar los verdaderos problemas del pueblo salvadoreño”.
“Su última víctima trató de que fuera el expresidente Alfredo Cristiani. Ante ello, INTERPOL dijo que no iba a capturar porque no se iba a prestar al juego sucio por parte del Gobierno de la República”, destacó Saade.
Para el tricolor, “no es momento de generar odio, es momento de unirnos como salvadoreños para que podamos sacar adelante a nuestras familias para que podamos sacar adelante a todo el pueblo salvadoreño”.
Es de recordar que la FGR procedió a allanar diferentes propiedades del expresidente de la República, Félix Alfredo Cristiani Burkard. La totalidad económica de todos los bienes a materializar es de $10,620,210.24. En total, la Fiscalía intervino 156 propiedades, de las cuales, 143 son inmuebles de la sociedad Cristiani Burkard, S.A. de C.V., 7 inmuebles de la Droguería Santa Lucía S.A. de C.V., 6 inmuebles de la Sociedad Montebro S.A. de C.V., 15 cuentas bancarias y 42 vehículos.
Cristiano también es señalado de participar en la planificación de la masacre de los jesuitas de la UCA y dos colaboradoras el 16 de noviembre de 1989, durante el conflicto armado y cuando precisamente Cristiani era presidente de la República.
El exjefe de estado dijo en un comunicado del año pasado que “jamás hubiera autorizado que se hiciera daño al padre Ellacuría y a sus hermanos”; en ese momento, Cristiani consideró las acciones de la FGR como persecución política y judicial, en el intento de Gobierno por “desacreditar” y “destruir la democracia y el legado de los Acuerdos de Paz”.
