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La Policía Federal (PF) de Brasil identificó al hijo del presidente, Jair Bolsonaro, y concejal de Río de Janeiro (sureste), Carlos Bolsonaro, como uno de los principales responsables de un entramado criminal que se dedica a la difusión de noticias falsas (fake news, por su traducción al inglés).
La investigación se encuentra bajo secreto de sumario y es coordinada por el Tribunal Supremo del país, con la participación, entre otros, del delegado de la PF regional de Paraná (sur), Igor Romário de Paula, quien coordinó la Operación Lava Jato en Curitiba (sur) cuando el exministro de Justica, Sergio Moro, era juez instructor de la causa.
En ese mismo período fungía como superintendente de policía en Paraná, Maurício Valeixo, convocado luego por Moro cuando asumió la cartera de Justicia para comandar la PF.
Sin embargo, fue destituido por Bolsonaro, según aseguran medios de prensa, porque el presidente ya conocía de la investigación y la sospecha que recaía sobre su hijo.
Esta dimisión podría ayudar a obtener información sensible del caso, pero fundamentalmente podría provocar cambios en el grupo de investigadores responsables del caso, sobre todo luego de que Moro anunciara públicamente su renuncia.
De inmediato, el magistrado, Alexandre de Moraes, instructor del caso en el Tribunal Supremo, determinó que la Policía mantenga de manera inamovible a los investigadores en el caso para garantizar su continuidad y confidencialidad.
Los expedientes fueron iniciados en marzo del pasado año por el presidente del máximo órgano de Justicia en Brasil, Dias Toffoli, para investigar el uso de noticias falsas que servían como instrumentos de amenaza, extorsión, chantaje y presión sobre los magistrados de la Corte, trama en la que se encuentra implicado el concejal, Carlos Bolsonaro, como uno de sus líderes.
