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Rosmeri Alfaro
@RosmeriAlfaro
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) invertirá 200 mil dólares para el desarrollo del proyecto “Fortalecimiento de capacidades y desarrollo de estrategia de implementación de las directrices de políticas agroambientales en El Salvador”.
El proyecto que tendrá una duración de 14 meses busca fortalecer las políticas agroambientales, indispensables para la recuperación del ambiente, enfrentar el cambio climático, la seguridad alimentaria y la pobreza.
Según Dirección General de Ordenamiento, Forestal, Cuencas y Riego (DGFCR) el proyecto fortalecerá las capacidades institucionales del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), y del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), al integrar políticas agroambientales, tanto en la fase de formulación como en la fase de implementación.
El proyecto beneficiará a funcionarios de nivel técnico y gerencial al fortalecer sus conocimientos a través de la participación en talleres nacionales y regionales, el intercambio de experiencias y acceso a herramientas de capacitación virtual sobre políticas agroambientales. Asociaciones de agricultores, grupos indígenas, universidades, sociedad civil, ONG, también serán favorecidos.
“El objetivo del proyecto regional es compartir experiencias y aprendizajes entre países de la región, considerando que existen capacidades y buenos resultados en la aplicación de marcos políticos e institucionales agroambientales a nivel de los países”, indicó el coordinador de FAO-El Salvador, José Cristóbal Escobar.
Según Escobar “los beneficios que traerá al país la implementación del proyecto, será contar con políticas, planes y programas agroambientales y capacidades fortalecidas mediante el conocimiento adquirido, experiencias y el intercambio de lecciones aprendidas entre actores de otros países en América Latina y el Caribe”.
El proyecto contempla la realización de un estudio de diagnóstico que sistematice las leyes, decretos, normas, convenios, instituciones agrícolas, e instrumentos de políticas públicas de medio ambiente. De igual forma, el establecimiento de espacios de diálogo y debate sobre las directrices agroambientales desarrollados, y propuesta de una estrategia de implementación.
