AFP
Dos franceses fueron condenados a muerte este domingo en Irak después de que se rechazasen las alegaciones de tortura de uno de ellos, elevando a nueve el número de yihadistas franceses condenados a la pena capital en una semana de juicios.
Fodil Tahar Aouidate, de 32 años, y Vianney Ouraghi, de 28, fueron declarados culpables de pertenencia a la organización yihadista Estado Islámico (EI), delito susceptible de la pena de muerte en Irak, se haya combatido o no.
En total, 12 hombres trasladados juntos a finales de enero desde Siria a Irak están siendo juzgados en Bagdad desde el pasado domingo.
Además de Fodil Tahar Aouidate y Vianney Ouraghi, otros siete franceses y un tunecino -del que en su momento se dijo que era francés- fueron condenados a muerte, y otros dos franceses serán juzgados el lunes por el mismo tribunal antiterrorista de Bagdad, puesto que las autoridades kurdas de Siria que los capturaron no tienen relaciones diplomáticas con Damasco.
Fodil Tahar Aouidate dijo en la primera audiencia, el lunes, que había sido golpeado durante los interrogatorios «para que reconociera lo que le reclamaban». Este domingo, el juez leyó un informe médico-legal que concluía que «no hay rastros de tortura en su cuerpo».
Según la oenegé Human Rights Watch (HRW), los juicios iraquíes presentan «graves lagunas, incluyendo la tortura», con el empleo de «diversas técnicas que no dejan marcas, como golpear a los sospechosos en las plantas de los pies y simular ahogamientos».
Esta semana, esta oenegé pidió a Francia que no «subcontrate la gestión» de sus ciudadanos, porque París ha descartado firmemente repatriarlos y juzgarlos en el país de origen, tal como lo reclamaban los abogados de las familias.