Teherán/AFP
Las escuelas primarias de Teherán y otras ciudades iraníes tuvieron que cerrar el domingo a causa de nuevos picos de contaminación.
Las autoridades locales anunciaron el sábado el cierre de todas las escuelas de enseñanza primera en la provincia de Teherán exceptuando dos ciudades. La medida podría extenderse a toda la jornada de este lunes.
En la capital de 8,5 millones de habitantes, la contaminación alcanzó niveles muy elevados desde hace varios días.
La concentración en tasa de partículas (PM2,5) subió el sábado hasta 169 microgramos por metro cúbico en algunos barrios. La OMS recomienda una tasa inferior a 25 µg/m3 de media cada 24 horas.
El domingo por la mañana la concentración PM2,5 alcanzó 185 µg/m3 en el sur de Teherán y 174 en el centro, según las autoridades municipales.
Las autoridades de la provincia de Teherán también pidieron el cierre de minas y cementerías el lunes y reforzaron las restricciones de circulación en el centro de la capital.
En Tabriz y Orumieh, en el noroeste de Irán, las escuelas también cerraron el domingo por segunda jornada consecutiva, según la agencia oficial iraní IRNA.
En otras ciudades, como Ispahán (centro), Mashhad (noreste) y Arak (centro), la contaminación alcanzó niveles muy elevados pero las escuelas cerraron.
Cada año en esta época del año la contaminación alcanza máximos en Teherán, una ciudad entre 1.400 y 1.800 metros de altura, a causa del fenómeno de la llamada inversión térmica.