La Haya / AFP
Irán abogará este lunes por un levantamiento de las nuevas sanciones estadounidenses de «consecuencias dramáticas», durante la primera de las audiencias de una áspera batalla judicial entre Teherán y Washington ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
En un proceso iniciado en julio, Irán llamó a los 15 jueces permanentes de la CIJ, principal órgano judicial de la ONU, a detener el restablecimiento de las sanciones estadounidenses que Donald Trump anunció hace tres semanas.
En mayo, el presidente de Estados Unidos retiró a su país del acuerdo sobre el programa nuclear iraní, firmado por Irán y las grandes potencias en 2015, en el que Irán se compromete a no desarrollar el arma atómica.
Esta retirada marcó el restablecimiento de severas sanciones contra la República Islámica, hasta ahora suspendidas en virtud del acuerdo internacional.
– Un tratado de amistad –
Teherán desea con esta nueva batalla judicial entre ambos países ante la CIJ «poner fin de inmediato» a estas medidas.
La República Islámica pide a la Corte con sede en La Haya detener de manera temporal las sanciones, antes de que los jueces se pronuncien posteriormente sobre el fondo del caso.
Irán afirma que las acciones de Estados Unidos violan numerosas disposiciones del tratado irano-estadounidense de 1955.
Este texto poco conocido prevé «relaciones amistosas» entre las dos naciones y respalda los intercambios comerciales.
Sin embargo, Irán y Estados Unidos no mantienen relaciones diplomáticas desde 1980.
Donald Trump considera que las sanciones están destinadas a «aumentar la presión» sobre el régimen iraní para que «cambie de comportamiento», en especial en lo relativo sus ambiciones nucleares.
Trump dijo en cambio estar «abierto» a un nuevo acuerdo sobre el programa nuclear con Irán.
Pero el guía supremo iraní, Alí Jamenei, declaró la semana pasada que no habría «ni guerra, ni negociaciones con Estados Unidos».
La CIJ deberá pronunciarse sobre el final provisional de las sanciones que exige Irán en los dos meses siguientes al inicio de las audiencias. Una decisión final sobre el caso podría llevar años.
– Economía «asediada» –
A la primera ola de estas sanciones, lanzada a principios de agosto, se sumarán el 5 de noviembre otras medidas que afectan al sector petrolero y gasístico, que desempeñan un papel capital en la economía iraní.
En su solicitud a la CIJ, Teherán habla de un «asedio» económico impuesto por Washington, «con todas las consecuencias dramáticas que esto supone para la población iraní asediada».
Varias compañías internacionales –incluyendo las francesas Total y la alemana Daimler– ya comunicaron el final de sus actividades en Irán debido a la entrada en vigor de las sanciones.
Las compañías aéreas British Airways y Air France anunciaron igualmente el jueves la próxima suspensión de sus vuelos hacia Irán, argumentando que estas conexiones ya no eran rentables.
British Airways precisó en cambio que esta decisión no estaba relacionada con las sanciones estadounidenses.
Los abogados de Washington presentarán sus argumentos el martes. Según los expertos, Estados Unidos deberá alegar la incompetencia de la CIJ en este caso.