Gloria Silvia Orellana
@SilviaCoLatino
Y como tal, se encuentra trabajando en crear junto a su equipo de trabajo un ambiente propicio para inversiones japonesas en el país.
“Estamos checando e investigando con funcionarios de gobierno y otros embajadores y coleccionando toda la información e ideas para preparar cuando venga el tiempo para los inversionistas japoneses”, afirmó.
La investigación sobre la seguridad pública, económica y social son temas de análisis necesarios, para crear un clima de negocios más accesible en rubros como: el añil, semilla de marañón y café para importarlo a Japón.
“Estamos buscando una oportunidad de exportación de añil, no para teñir tejidos, sino para usarlo como producto farmacéutico para combatir una bacteria en la piel facial”, dijo el diplomático. Según un estudio de un profesor de Japón, hace años descubrió en el añil, un componente de este, es seis veces más efectivo que otro tipo de sustancias para reducir bacterias y es bueno para la piel, agregó.
Sobre este rubro, el embajador Kazuyoshi Higuchi comentó a Diario Co Latino que están buscando productores de añil, pero antes tendrán que analizar las muestras y realizar los estudios de laboratorio, y de corroborarse su efectividad en el combate de bacterias de la piel, podría ser un producto de exportación salvadoreña.
“Hace 300 ó 400 años las mujeres japonesas de esa época tenían un pantalón de trabajo y esos estaban teñidos por añil y los insectos no se acercaban y no es que tengan mal olor, el pantalón teñido era como un repelente a los mosquitos y otros insectos. El teñido del añil en la cultura japonesa estuvo desde hace cientos de años y era importante, claro ahora ya no se usa con esos fines”, explicó.
Otro de los rubros contemplados por inversionistas japoneses sería el “Pescado Bonito Seco” de aguas salvadoreñas, este pez por su carne tiene un parecido al atún o macarela.
“Quizá porque no comen al pez bonito, por eso no lo pescan. En Japón comemos bonito crudo con alga o como el salmón, pero estamos pensando en la especie de pescado bonito, pero seco. O sea, procesarlo para que una empresa salvadoreña aprenda la técnica y hagan al bonito en cortes delgados y secar su carne hasta que tenga mayor dureza y esta carne se corta en filetes muy delgados, para luego rasparlo y convertirlo en polvo para sopa del pez bonito seco, como un consomé”, describió.
En cuanto a la preparación de la carne del pez bonito a seco, el diplomático afirmó que no tiene que ser una industria con máquinas o procesos automatizados, sino que, aprendiendo la técnica japonesa se manufactura de forma artesanal.
“Se toma un bonito y se corta de arriba abajo y se pone a secar, y luego se siguen haciendo tajos de la carne hasta que va disminuyendo a filetes finos”, explicó.
Mientras, la semilla de marañón y el café salvadoreño que ya cuentan con consumo en Japón, el embajador Higuchi comentó que se encuentran interesados en mayor cantidad, aunque lo primordial para este mercado asiático es la “calidad”.
“Yo sé que El Salvador exporta semilla de marañón grande a India sin procesos, así de forma natural y en India hacen ese proceso y luego las exportan Japón y a otros países, utilizando la semilla de marañón de El Salvador. India produce semilla de marañón, es el número dos en exportación, pero es pequeña, y la semilla de El Salvador es mejor en su calidad y tamaño”, afirmó.
En cuanto al café, Japón es el segundo importador de El Salvador, el primero es Estados Unidos, alrededor del 44% va a la Unión Americana y Japón compra alrededor del 12%, reconociendo que los mercados internacionales lo reconocen.
“Hay demanda del café de El Salvador por su calidad, a Japón no le importa si es caro, porque los japoneses les gusta la calidad. Y el Pacarama es el mayor calidad”, reafirmó el embajador Kazuyoshi Higuchi, quien desde hace tres meses se vislumbra como un gran aliado de El Salvador.