NACIONES UNIDAS/Xinhua
El subsecretario general de la ONU para Asuntos Humanitarios y coordinador de Ayuda de Emergencia, Martin Griffiths, expresó este lunes su profunda preocupación por el deterioro de la situación en Afganistán y condenó en términos enérgicos los ataques contra los civiles.
En una declaración, el jefe humanitario de la ONU dijo que está “extremadamente preocupado por la situación cada vez más deteriorada en Afganistán, en donde más de 1.000 personas han muerto o han resultado heridas debido a ataques indiscriminados contra civiles en las provincias de Hilmand, Kandahar e Hirat tan sólo en el último mes”.
“Los niños, mujeres y hombres afganos están sufriendo y se ven forzados a vivir con violencia, inseguridad y miedo todos los días”, dijo Griffiths.
Griffiths dijo que existe una “grave preocupación” por la supervivencia y los derechos básicos de las mujeres.
“Cuarenta años de guerra y desplazamiento, junto con impactos climáticos y la COVID-19, han dejado a cerca de la mitad de la población de Afganistán con necesidad de ayuda de emergencia”, añadió.
“Me uno al secretario general António Guterres y a los miembros del Consejo de Seguridad en la enérgica condena a los ataques contra civiles y hago eco de su llamado para un cese al fuego. Los enfrentamientos en todo el país, los cuales han cobrado la vida de más de 40.000 personas desde 2009 cuando la ONU empezó a reportar, tienen que cesar. Las personas ya han sufrido suficiente”, dijo Griffiths.
El jefe humanitario enfatizó que las organizaciones humanitarias están comprometidas a brindar alivio y ayuda a todos los civiles en Afganistán.