Washington / AFP
JetBlue anunció el lunes su intención de convertirse, a partir de julio, en la primera gran compañía aérea estadounidense en compensar las emisiones contaminantes de todos sus vuelos internos, con el objetivo de alcanzar la neutralidad de carbono.
En momentos en que las compañías aéreas de todo el mundo están bajo la lupa de activistas como la joven sueca Greta Thunberg en sus denuncias sobre el cambio climático, esta empresa estadounidense va a utilizar combustible sostenible para sus vuelos que salgan del aeropuerto de San Francisco a partir de mediados de 2020, según precisó en un comunicado.
Basada en Nueva York, JetBlue transporta a más de 42 millones de pasajeros al año a unas 100 ciudades estadounidenses y opera un promedio de mil vuelos diarios.
«Reduciremos (las emisiones de carbono) allí donde nos es posible y compensaremos allá donde no estamos en capacidad de hacerlo», explicó el CEO de la compañía Robin Hayes, citado en el texto.
«La industria del transporte aéreo es una de las pocas industrias en comprometerse colectivamente con un objetivo internacional de reducción de emisiones», dijo, a la vez que aseguró que aunque la compensación «no es una solución milagrosa» sí es un «puente a un futuro» menos contaminado.
Para obtener créditos de carbono, JetBlue va a invertir en proyectos destinados a evitar la destrucción de los bosques.
También desarrollará parques solares y eólicos para producir electricidad, y tiene un proyecto para captar gas de desecho para convertirlo en fuente de energía renovable.
La compañía ya había empezado a compensar sus emisiones de dióxido de carbono con programas que buscan equilibrar los vuelos en ciertos periodos del año, pero decidió redoblar sus esfuerzos.
JetBlue seguirá asociada a Carbonfund.org, una organización estadounidense que impulsa la reducción de las emisiones y soluciones climáticas.
Su programa deberá compensar entre 7 y 9 millones de toneladas de emisiones anuales, lo que equivale a la salida de circulación de más de 1,5 millones de vehículos particulares, precisó JetBlue.
La empresa no detalló, en tanto, el eventual costo de estas nuevas medidas.
Las 290 compañías aéreas reunidas en el seno de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (Iata), se han puesto el objetivo de reducir sus emisiones de carbono a la mitad de aquí a 2050 con respecto a 2005.