Oscar López
@OscarCoLatino
Asus 47 años, Mario Ramírez cumplió una de sus metas, graduarse de bachillerato, por circunstancias de la vida esto le tomó más tiempo y esfuerzo, por lo que la satisfacción de lograr uno de sus objetivos se reflejaba en su rostro.
“He tenido muchos obstáculos, tropiezos, a los ocho años perdí a mi padre, nos criamos seis hermanos solo con mi madre que se dedicaba a oficios domésticos, por eso fue difícil tanto para mí como para mis hermanos”, relató Ramírez.
El graduado agregó que de haber continuado sus estudios se habría graduado de bachillerato en 1987, sin embargo, las condiciones socio económicas de su familia no se lo permitieron, ya que tuvo que iniciar su vida laboral y relegar su formación académica.
“Tuve que ayudar a mi familia, a mi madre, al ver esa situación tan precaria y difícil tuve que suspender en ese momento las clases, me quedé en noveno grado, en 2007 volví a retomar las clases”, explicó el graduado.
Martínez formó parte del grupo de graduados de bachillerato que culminaron sus estudios con la “prueba de suficiencia”, la que evalúa conocimientos en las asignaturas básicas: matemática, ciencias naturales, estudios sociales y lenguaje y literatura.
La prueba de suficiencia es una de las ofertas de las Modalidades Flexibles, con las que se pretende que jóvenes y adultos que por alguna circunstancia salieron del sistema educativo retomen sus estudios. Datos del Ministerio de Educación (MINED) indican que a la fecha un mil 24 personas obtuvieron títulos de bachiller entre 2008 y 2017.
El MINED prevé aplicar durante el 2018 unas 2 mil 800 pruebas de suficiencia, para ello cuenta con un presupuesto de $54 mil, lo que representa una inversión de $19.29 por cada estudiante que se somete a la misma.
La prueba de suficiencia se realiza cuatro veces al mes, para cada aplicación se programan a 110 personas (55 de educación básica y 55 de educación media). La prueba contempla para primero y cuarto grado de educación básica 120 ítems (30 por cada asignatura) y 140 preguntas (35 por asignatura) de quinto a noveno grado y 160 ítems (40 por asignatura) para primero y segundo año de bachillerato general.