Samuel Amaya
@SamuelAamya98
El Juzgado Tercero de Paz de San Salvador decretó la tarde de este viernes, la detención provisional contra el expresidente de la República, Alfredo Félix Cristiani Burkard y el exdiputado de la Asamblea Legislativa, Rodolfo Parker, por estar involucrados en la masacre en la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA), cuando efectivos militares, en noviembre de 1989, asesinaron a seis sacerdotes jesuitas y dos colaboradoras. Cristiani era comandante general de las Fuerzas Armada, de acuerdo con la Constitución, por ser presidente de la República.
Además, el Juzgado ordenó la captura del excoronel Orlando Inocente Montano, quien fue condenado en España a 133 años de prisión por el mismo caso. Cristiani y Montano, se les impuso la detención, ya que ni ellos ni sus abogados se presentaron ante el juzgado. Parker sí tuvo defensa en sede judicial, pero se desconoció el motivo por lo que el exdiputado no compareció.
A la sede judicial solamente llegaron el excoronel Camilo Hernández y el exgeneral Juan Rafael Bustillo. El juez otorgó medidas sustitutas a la detención provisional para ambos, ya que el juez consideró que por su presencia desvanece un intento de fuga. Sin embargo, deberán presentarse a sede judicial cada 15 días y tienen prohibido salir del país.
Ante la resolución del Juzgado Tercero de Paz, en la que ordena la detención provisional contra el expresidente Alfredo Cristiani, su hija, Claudia Cristiani, hizo público un pronunciamiento, en el que Cristiani asegura que en el país «no hay garantías procesales».
Cristiani contextualizó que la mayor parte de magistrados, jueces y fiscales “son impuestos y completamente serviles al poder presidencial”.
“El fiscal general (Rodolfo Delgado), de mala fe y con claro desprecio a la verdad, me ha acusado públicamente de omisión y de encubrimiento. La verdad es que nunca supe de los planes que tenían para cometer esos asesinatos (de los padres jesuitas y dos colaboradoras). Nunca me informaron ni me pidieron autorización porque sabían que jamás hubiera autorizado que se hiciera daño al padre Ellacuría o a sus hermanos”, comentó Cristiani.
El exmandatario sostuvo que se ha cuestionado que el comandante en jefe de la Fuerza Armada no tuviese algún conocimiento previo de los planes para asesinar a los padres. “La verdad es que después de largos años de regímenes militares y golpes de Estado, la subordinación al poder civil no ocurrió de la noche a la mañana, y no se consolidó sino hasta después de la firma de los Acuerdos de Paz”.
El exfuncionario que ahora se encuentra fuera del país, afirmó que el asesinato de los padres jesuitas, de Elba y Celina Ramos “fue un acto espantoso y salvaje. Las víctimas de éstas y otras muchas atrocidades tienen derecho a la justicia y el pueblo salvadoreño tiene derecho a saber la verdad, pero la acusación del fiscal general no busca ni justicia ni verdad. Busca perjudicar a quien consideran un opositor político inconveniente”.
La representación fiscal sostuvo que en términos generales la resolución ha sido “satisfactoria”; sin embargo, cuando se tenga la resolución por escrito harán las valoraciones pertinentes. El juez determinará las instancias correspondientes para hacer efectivas las detenciones.