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Londres / Prensa Latina
La Corte de Magistrados de Westminster anunció el viernes que en febrero de 2020 celebrará una audiencia sobre el pedido de extradición presentado por Estados Unidos contra el fundador de Wikileaks, Julian Assange.
La fecha fue fijada por la jueza Emma Arbuthnot durante una breve vista oral celebrada este viernes en el tribunal londinense, en presencia del letrado norteamericano Ben Brandon, en representación de Washington, y de los abogados de Assange, quien, por su parte, compareció vía videoconferencia desde la prisión de Belmarsh.
De ser enviado a Estados Unidos, el ciberactivista, condenado a 50 semanas de cárcel por violar una fianza otorgada por la justicia británica en relación con un caso de presuntos delitos sexuales cometidos en Suecia, podría ser sentenciado a 175 años de prisión por divulgar miles de archivos secretos de la diplomacia y los militares norteamericanos.
Wikileaks no es otra cosa que un medio de comunicación, le aseguró este viernes Assange a la magistrada británica, a quien recordó que ‘están en juego 175 años de su vida’.
El abogado defensor Mark Summers alegó, por su parte, que existe un serio problema de fondo alrededor de la petición presentada por Estados Unidos, la cual representa, dijo, un ataque frontal e indignante contra los derechos periodísticos.
El periodista australiano fue arrestado por Scotland Yard el 11 de abril pasado después que el gobierno ecuatoriano le retiró el asilo político concedido en 2012, cuando se refugió en su embajada en Londres para evitar ser extraditado a Suecia.
Inmediatamente después de su detención, el departamento de Justicia de Estados Unidos presentó al Reino Unido una solicitud de extradición, la cual ya fue firmada y certificada por el gobierno británico.
De ser enviado a la corte distrital de Virginia, la cual se ocupa de todos los casos relacionados con la seguridad nacional estadounidense, Assange enfrentaría 18 cargos que incluyen desde conspiración para cometer piratería informática hasta espionaje, y conllevan una sentencia total de 175 años de cárcel.
Los abogados de Assange, quienes han denunciado las restricciones impuestas por las autoridades penitenciarias británicas para visitar a su cliente, aseguran, por su parte, que el proceso de extradición a Estados Unidos podría demorar meses, quizás años, como resultado de las apelaciones.
