Por: Rolando Alvarenga
De acuerdo a las modificaciones realizadas a la Ley General de los Deportes -que fueron aprobadas por la Asamblea Legislativa- de ahora en adelante “apartar de toda actividad federativa a una deportista en estado de gestación (embarazo) por parte de los entes deportivos” será considerado como una infracción grave. Asimismo, suspender, eliminar o suprimir los estímulos será considerado como trasgresión grave.
En lo que respecta a las embarazadas, me parece una modificación justa porque se da cuando aún está fresco el recuerdo de las injusticias que cometieron el INDES y COES en el anterior Ciclo Olímpico con las atletas de estatus olímpico Melissa Mikec – fusilera salvadoreña residente en Serbia- y la experimentada ciclista Evelyn García, residente en España.
Dos casos que por injustos conmovieron a la gran familia deportiva nacional, hasta sensibilizar las fibras de los más profundos sentimientos humanos por el trato que se dio a ambas mujeres deportistas.
Por ello, esta modificación legislativa alegra a muchos porque viene a corregir una inconcebible injusticia contra dos mujeres que le han dado mucho al país; pero, también sería bueno y oportuno (si no lo han hecho) que se establezca de una vez por todas el tipo de sanción económica que tendrán que pagar todos aquellos que vuelvan a cometer una infracción contra las deportistas embarazadas. Y es que siempre dejan a medias las cosas y por eso el atleta siempre resulta pisoteado.
En lo que concierne a los estímulos económicos estatales, debería establecerse que el INDES pague al día los estímulos a los atletas. Más o menos, aunque son dos casos distintos, con la misma puntualidad que le paga a la burocracia u a otras personas. Por ello, para cumplir puntualmente con los atletas el Ministerio de Hacienda, el INDES y la Corte de Cuentas deben planificar y trabajar de la mano para no perjudicar a los deportistas. Porque hay que recordar que, sin atletas, el INDES no tendría razón de ser y menos el sindicato.
Sobre el Seguro para los atletas, con sentido humanitario y valorización del atleta -como en Cuba, por ejemplo- la patria les agradecería mucho a los diputados que en la Ley de los Deportes quede plasmada la obligación del INDES y el Comité Olímpico de asegurar a los atletas. Porque aparte de las atenciones médicas generales y otros servicios afines, la integridad física del atleta siempre ha estado y está en las manos de Dios y terrenalmente en alas de cucaracha.
En materia de autonomía de las federaciones, sería bueno que los diputados acordaran que si el Comité Olímpico quiere aprovecharse de los atletas y federaciones, que invierta sus propios recursos económicos y los trabaje integralmente; porque, a través de los años, el mayor peso de esta inversión ha caído en el Estado y al final el Comité los ha tomado para sus tours.
Sin duda, todos los artículos modificados en la Ley de los Deportes constituyen una buena señal para que mejoren las condiciones de los atletas en general y en especial de los pocos atletas de alta competencia que nos van quedando. Atletas que por su trabajo, esfuerzo y sacrificio son merecedores de otras condiciones de vida para que se sientan motivados y se rompan el alma por el país.
*Los conceptos vertidos en esta columna son de exclusiva responsabilidad de quien los presenta.