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El Juzgado 6° de Instrucción de San Salvador anuló la detención provisional impuesta por un juzgado de paz contra Earle René Reyes Morales y Byron Enrique Larrazabal Arévalo, porque no se les notificó debidamente del proceso en su contra, por tal razón el juzgado los va a citar para intimarlos y así valorar qué medida cautelar les impondrán.
Además, el juzgado informó que una vez citados, si los procesados se hacen presentes al juzgado les darán a conocer de la imputación en su contra y el juez Roberto Ortuño va a analizar si procede alguna medida cautelar, como arresto domiciliar, caución económica, brazalete electrónico o presentarse cada cierto tiempo a firmar al juzgado. Si los imputados no se presentan a pesar de ser citados se declararán rebeldes.
Los dos imputados también son acusados de lavado de dinero y activos. A Larrazabal se le suma el delito de estafa agravada en perjuicio del IPSFA.
Según la Fiscalía, el monto atribuido a Byron Larrazabal es de $1.500.000, mientras que a Earle Reyes $500.000.
La audiencia especial fue ordenada por la Cámara Primera de lo Penal, basada en recursos de apelación de parte de la defensa técnica contra la resolución que les decretó la detención provisional.
La detención provisional fue donde alegaron afectación al derecho de la libertad personal ambulatoria por la imposición de la detención sin que el juzgado hubiese realizado como condición previa las actuaciones legales ante la no comparecencia del imputado, en nombrarle defensor particular o defensor de oficio.
Asimismo, los magistrados de la Cámara argumentaron que el juzgador efectuó una infracción al derecho de protección jurisdiccional, en el sentido que no se agotaron todos los medios procesales de comunicación para notificarles a los imputados y defensa técnica del proceso penal llevado en contra de los encausados. Finalmente, informó el Juzgado de Instrucción que en esta causa penal se procesa a un total de 14 personas, entre estas el expresidente de la Asamblea Legislativa, Sigfrido Othón Reyes, por los supuestos delitos de lavado de dinero y activos, peculado, estafa agravada e incumplimientos de deberes.
Sigfrido Reyes ha sostenido que la acusación en su contra es una persecución política, dado que también fue de la dirección del partido de izquierda FMLN.