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KABUL/Xinhua
Kabul, la capital de Afganistán, ha experimentado unos días relativamente pacíficos desde que el grupo Talibán tomó el control de la ciudad el domingo, pero los residentes han estado viviendo con incertidumbre debido a que el nuevo sistema aún tiene que reemplazar formalmente a la anterior administración.
En una acción rápida pero pacífica, los combatientes del Talibán capturaron Kabul el domingo. Desde entonces, la ciudad ha estado en calma sin que se hayan reportado graves incidentes de seguridad.
Sin embargo, las oficinas de Gobierno, así como las escuelas y universidades privadas y estatales en su mayoría permanecen cerradas a pesar del llamado del Talibán a los empleados de que asistan a sus empleos y continúen su trabajo.
El martes por la noche, el portavoz del Talibán, Zabihullah Mujahid, en su primera conferencia de prensa desde la entrada de los talibanes a Kabul, pidió a los empleados gubernamentales y a los del sector privado reanudar sus deberes normales, y señaló que su vida y propiedades están seguras y protegidas.
Mujahid, quien defendió los 20 años de guerra del Talibán contra las fuerzas encabezadas por Estados Unidos, señaló que derrotaron a las fuerzas extranjeras invasoras y liberaron al país de la ocupación extranjera.
Al anunciar el fin de la prolongada guerra en Afganistán, Mujahid que el «Emirato Islámico (de Afganistán)» no tiene ninguna enemistad con nadie y ha declarado amnistía general para todos los afganos incluidos los antiguos enemigos, aludiendo a la defensa nacional y las fuerzas de seguridad. Además, indicó que los empleados del anterior Gobierno, incluyendo los del ejército y de la policía pueden vivir libres de temor en la patria.
También aseguró que las misiones diplomáticas extranjeras, las oficinas de Naciones Unidas y las agencias no gubernamentales pueden continuar su trabajo y que el Talibán quiere tener un Gobierno de base amplia en Afganistán.
Al abordar las preocupaciones de ciertos países, Mujahid dijo en la conferencia de prensa que «aseguramos a la comunidad internacional, a nuestros vecinos, a los países regionales y a Estados Unidos de América» que Afganistán no será usada contra ningún país.
El Emirato Islámico (de Afganistán) respetará el derecho de las mujeres y las mujeres pueden trabajar en el sector de educación, salud y otros campos en el marco de la sharia o ley islámica, indicó.
Desde que las tropas estadounidenses empezaron a salir de Afganistán el 1 de mayo, el Talibán empezó a lanzar importantes ofensivas contra las fuerzas afganas. Durante las últimas dos semanas, el grupo militar ha capturado la mayor parte de los territorios de Afganistán en sus ofensivas, incluyendo contra la capital Kabul.
En medio de la rápida evolución de la situación, algunos residentes en Kabul temen el estallido de otra guerra y les preocupa el futuro incierto, debido a que las conversaciones entre afganos no han logrado dar frutos.
«Muchos antiguos caudillos se han extraviado fuera del país o están escondidos en el país, y ellos pueden volver», comentó el vendedor Mohammad Azim a Xinhua.
«Afganistán es el depósito de armas y cualquier error puede detonar un violenta guerra», expresó Noor Khan, un residente de Kabul.
Khan, quien estaba intentando huir del país debido a la inestable situación, dijo que aparte de mantener la paz y la seguridad, las autoridades también necesitan garantizar las oportunidades de empleo y la estabilidad económica para los ciudadanos.
