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Por Ioulia Silina/Olga Nedbaeva
Donestsk/Kiev/AFP
Kiev y los líderes prorrusos alcanzaron este martes un acuerdo de alto el fuego en una de las regiones separatistas del este de Ucrania, pills diagnosis si bien las negociaciones continúan para tratar de poner fin a ocho meses de conflicto.
Además de la tregua firmada en la región de Lugansk, uno de los bastiones de los separatistas, ambos bandos alcanzaron también un cese del fuego en el aeropuerto de Donetsk, uno de los principales escenarios del conflicto y donde se libran combates casi sin interrupción desde hace varios meses.
«Hoy, alcanzamos un acuerdo para poner fin a los combates a partir de las 18H00, horas de Moscú [15H00 GMT], en el aeropuerto de Donetsk», anunció a los periodistas el líder separatista Andrei Purguin.
Las negociaciones se llevan a cabo en Donetsk, mientras que, en Kiev, el parlamento ucraniano debe aprobar la formación del nuevo gobierno, en el cual figuran como ministros varios extranjeros, entre ellos una ciudadana estadounidense.
El general Alexandre Lentsov, número dos del ejército ruso, y el general ucraniano Volodymyr Askarov se encuentran reunidos en Donetsk, bastión de los separatistas prorrusos, con representantes de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) y de la autoproclamada República de Dontesk (DNR), indicó una fuente separatista a la AFP.
La víspera, los dos generales fijaron las bases del acuerdo de alto el fuego en el aeropuerto de Donetsk, donde en los últimos tres días se recrudecieron los combates entre las fuerzas ucranianas y separatistas. El martes por la mañana se registraron tiros de artillería en las inmediaciones al complejo aeroportuario.
Andrei Purguin había indicado con anterioridad que las negociaciones se llevaban a cabo «en el marco de los acuerdos de Minsk», donde el 5 de septiembre se firmó una tregua entre el gobierno de Ucrania y los separatistas, con la participación de Rusia y la OSCE, que quedó en papel mojado.
Desde entonces, más de 1.000 personas murieron en el este de Ucrania, según estadísticas de Naciones Unidas. En total, más de 4.300 personas murieron desde el inicio del conflicto en abril pasado.
El martes, el ejército ucraniano denunció 52 ataques contra sus posiciones en las últimas 24 horas que causaron la muerte de dos civiles.
Rusia, acusada por Kiev y los occidentales de armar a los separatistas y haber desplegado tropas en el este de Ucrania, desmiente cualquier participación en el conflicto, pero acepta un papel de «mediador» en las negociaciones.
Acuerdo de Lugansk
En la región separatista de Lugansk, fronteriza de Donetsk, el gobierno ucraniano y los separatistas acordaron un alto el fuego que entrará en vigor el 5 de diciembre, anunciaron el martes la OSCE y el dirigente de esa región, Igor Plotnitski.
El acuerdo se alcanzó al término de una reunión mantenida el 29 de noviembre en Lugansk entre los generales ucraniano Askarov y ruso Lentsov, representantes de la autoproclamada República de Lugansk y de la OSCE.
Todas las partes «se pusieron de acuerdo en un alto al fuego total a lo largo de la línea del frente a partir del 5 de diciembre», indicó la OSCE en un comunicado.
«También acordaron retirar las armas pesadas a partir del 6 de diciembre», agregó la fuente.
Por su parte, un portavoz militar ucraniano, Andrii Lysenko, dijo que no disponía de informaciones sobre el tema y precisó a la AFP que los tiros proseguían.
