Sí. Así de cierto y así de contundente. En el más reciente informe económico de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA), establece que el Modelo Económico Neoliberal es el principal responsable de la actual crisis fiscal, al que le debemos agregar, decimos nosotros, el boicot financiero en el que se metió la Sala de lo Constitucional y la tozudez y hasta estupidez de ARENA, de negarle los votos para que el Gobierno pueda colocar 1,200 millones de dólares en bonos para tener capital fresco.
El departamento de Economía de la UCA señala, en el posicionamiento ante la crisis fiscal, que ésta ha sido ocasionada “por las políticas neoliberales aplicadas desde los 90”.
Recordemos que, con la implantación del modelo neoliberal, los gobiernos de ARENA abandonaron el tejido productivo. Es decir, se abandonó la producción agrícola y la mal desarrollada y elitista industrialización del país. Y, que para salirle al paso al tema fiscal, vendieron los activos del Estado. Por cierto, esta es el principal componente de las recetas neoliberales que los gobiernos areneros cumplieron al pie de la letra.
El modelo económico de los gobiernos de ARENA, destaca la UCA, se fundamentó en tres situaciones: las inversiones en los servicios, el comercio y los negocios de importación. Y es que la apuesta de la derecha salvadoreña, empresarial y política, era convertir las remesas de los salvadoreños en ganancias inmediatas.
Tan claro tiene la UCA el origen de la situación fiscal actual, que a pesar de que reconoce los esfuerzos de los gobiernos del FMLN para combatir los efectos del neoliberalismo, recomienda, sin rodeos, cambiar el modelo neoliberal.
Y es que no es posible, por ejemplo, que 10 familias más ricas del país se lleven el 34% del PIB, mientras que el 10% de las familias más pobres del país se reparten el 2% del PIB. Es desbalance desigual, que incrementa la desigualdad y la pobreza, lo que impacta, en alguna medida en la tributación fiscal.
Debemos felicitar al departamento de Economía de la UCA, por sacar ese posicionamiento sobre la actual crisis fiscal, porque obliga a la comunidad académica y política a discutir el tema con la seriedad que esta demanda, y no con el oportunismo político como lo trata el sector empresarial más ideologizado y la perversa cúpula del partido ARENA.