2a. parte
Una mujer que se encuentra embarazada no debe comer por 2 personas bajo ningún pretexto. Se sabe que el aumento total de peso de una mujer embarazada tiene que ser de 20-30 libras sobre el peso previo al embarazo, esto quiere decir, comparado un aumento de peso como el de un bebé de hasta 3 años de edad. Pero si come como que está alimentando a dos personas adultas, puede resultar ser una lamentable equivocación en el embarazo. Otro problema que se observa en nuestro ambiente es a nivel de la mujer embarazada que trabaja. Come de todo lo que pasa por el centro de trabajo y que le ofrecen los vendedores ambulantes de golosinas. Como resultado se tiene un desbalance de nutrientes y un parasitismo de todo tipo por la contaminación que sufren estos productos de la calle. Esta preferencia por las chucherías o golosinas son interpretadas como “deseos, gustos y antojos” propios del embarazo, y que deben ser forzosamente complacidos pues si no se le puede “caer el niño”, es decir, abortar. Mitos de la vida diaria que llevan a la madre embarazada a desarrollar obesidad y desbalance nutricional al mismo tiempo. Clásico es el deseo de comer tierra o de morder las paredes de adobe como un capricho, deseo o gusto del embarazo y que no es más que una compulsión que provocan los parásitos intestinales en la mujer embarazada. Se observa esta misma compulsión en los niños parasitados de oxiuros (pica) y la consiguiente deficiencia vitamínica y de minerales que estos parásitos producen y que el organismo trata de compensar induciendo al deseo de comer tierra u otros productos folklóricos, que como ya se sabe, la tierra es rica en trazas de minerales, pero que además también contiene huevos o larvas de parásitos volviendo así el ciclo del parasitismo algo sin fin.
Razón hay de recomendar complementos multivitamínicos y de minerales en las mujeres embarazadas y lactantes para compensar estos desbalances en la dieta. Estos complementos dietéticos no son necesarios en la mujer que recibe una dieta balanceada y suficiente y que se mantiene libre del parasitismo intestinal durante el embarazo y lactancia.
Para valorar este problema de parasitismo intestinal se tiene que mencionar que, en nuestro país, por estudios serios efectuados por la Dra. Anne Foster Rosales, el 95 % de las mujeres salvadoreñas se muestran parasitadas en algún momento del embarazo. Un problema muy serio de Salud Pública en nuestro país.