Lo propio del método ana-léctico es que es intrínsecamente ético y no meramente teórico, como es el discurso óntico de las ciencias u ontológico de la dialéctica. Es decir, la aceptación del otro como otro significa ya una opción ética, una elección y un compromiso moral: es necesario negarse como totalidad, afirmarse como finito, ser ateo del fundamento como identidad.
Enrique Dussel
Rossel Montes
Filosofo hondureño
Hace exactamente un año escribí un artículo explicando de forma general y sintetizada la ética y filosofía de la liberación del profesor Enrique Dussel. Un año ha pasado y mis lecturas sobre el filósofo argentino-mexicano se han agudizado y profundizado, lo cual me ha brindado la oportunidad de meterme de lleno a todo un mundo categorial donde se entremezclan tanto la ontología, ética, epistemología, pedagogía (pedagógica) una erótica y una política latinoamericana de la liberación. La filosofía de la liberación siendo parte de las sistemas filosóficos abiertos y no cerrados (Hegel, Heidegger, G.Bueno) se ha propuesto la superación dialéctica-analéctica de las posturas que desde la modernidad europea vienen predominando e influenciando a pensadores de todas las áreas, desde la física cuántica a la sociología, filosofía analítica, antropología, ciencia política, neopositivismo lógico.
Un punto central y que para mí es algo muy importante dentro del sistema categorial abierto de Dussel es el término ANALÉCTICA, categoría acuñada por él y que potencialmente ya existía en la historia de la filosofía occidental pero que en este caso fue creada y sistematizada por un latinoamericano para comprender-aprehender las realidad latinoamericana. A pesar de la gran importancia e influencia que tiene nuestro pensador, filósofo, historiador y teólogo en otras regiones del continente, incluso hasta en los Estados unidos, ya que se sabe ha polemizado con el filósofo estadounidense John Rawls el autor de la “Teoría de la justicia”, obra que ha desencadenado desde los 80s la polémica entre liberales y comunitaritas y participacionistas. “La teoría de la justicia” encuentran en algunas bibliotecas de Honduras e incluso la obra crítica de esta, “Anarquía, Estado y utopía” publicada en 1974 de Robert Nozik. El que definitivamente no se encuentra es el libro de Michael Sandels( filósofo norteamericano) “Los límites del liberalismo” y así una larga lista de autores que no son estudiados y olímpicamente desconocidos por nuestra intelectualidad la cual muchas veces es como caja de resonancia de las teorías que en otros lares ya se vienen discutiendo desde finales del siglo pasado y que son concebidos como meros cadáveres.
El método analéctico en Dussel es una ruptura teórica o revolución teórica parafraseando a Althusser, revolución parecida a la que hizo Marx en su época con la utilización del método dialéctico el cual devino en “dialéctica materialista” de la cual resultó toda una pléyade de términos y categorías sociológicas, económicas, una filosofía de la historia que fue duramente criticada por Cornelius Castoriadis en su “Institución imaginaria de la sociedad” sobre todo el racionalismo objetivista, la escatología y teleología de la ontología marxista con la cual el mismo Castoriadis y Dussel rompieron. Sería interesante hacer un trabajo comparativo sobre estos dos pensadores ya que tienen puntos de encuentro aun sin haber tenido algún contacto coinciden en algunos puntos importantes como la superación de la dialéctica hegeliano-marxista solamente que en este caso Dussel va más allá en el plano epistemológico y propone el método “analéctico”.
Sobre su método Dussel nos dice: La crítica a la dialéctica hegeliana fue efectuada, como lo hemos visto, por los poshegelianos (entre ellos Feuerbach, Marx y Kierkegaard). La crítica a la ontología heideggeriana ha sido efectuada por Levinas. Los primeros son todavía modernos; el segundo es todavía europeo. Resumiremos indicativamente el camino seguido por ellos para superarlos desde América latina. Ellos son la prehistoria de la filosofía latinoamericana y el antecedente inmediato de nuestro pensar latinoamericano. No podíamos contar ni con el pensar preponderante europeo (de Kant, Hegel o Heidegger) porque nos incluyen como «objeto» o «cosa» en su mundo; no podíamos partir de los que los han imitado en América latina, porque es filosofía inauténtica. Tampoco podíamos partir de los imitadores latinoamericanos de los críticos de Hegel (los marxistas, existencialistas latinoamericanos) porque eran igualmente inauténticos. Los únicos reales críticos al pensar dominador europeo han sido los auténticos críticos europeos nombrados o los movimientos históricos de liberación en América latina, África o Asia.
La analéctica dusseliana pretende ser la superación ontológica, ética y epistemológica de la lógica-ontología hegeliano-marxista que tanto ha influenciado a la filosofía y las ciencias históricas en el siglo XX. El método dialéctico ha sido asimilado por la sociología, la historia, la economía y sobre todo por los pensadores marxistas tanto dogmáticos y heterodoxos, tanto los estalinistas, trotskistas y la “Escuela de Frankfort” con gente como Marcuse, Adorno o Habermas aunque este último si ha criticado al marxismo sobre todo su tendencia al determinismo económico y la sobredimencionalidad de la técnica para comprender los procesos históricos y los mecanismo de cambio en las sociedades.
La analéctica supera a la dialéctica en tanto la dialéctica forma parte ontológicamente de la modernidad europea de la cual Hegel, su máximo exponente con su filosofía del “saber absoluto” y Marx que tomara su escatología, historicismo a decir de Popper y teleologismo; es decir, esa tendencia propia de los sistemas filosóficos que conciben el devenir histórico-social ya determinado y predeterminado. Al igual que las grandes religiones los sistemas cerrados devienen en fantasías y prometen el paraíso aquí en la tierra y generan esperanzas de cambio, lo cual posibilita que sus adeptos fomenten una especie de posturas hacia el dogmatismo incluso en algunos casos más férrea que en algunos religiosos. La analéctica dusseliana supera a la dialéctica según nuestro autor en que este incluye el momento ético, el momento de la otredad, a lo cual Dussel llama “La exterioridad metafísica del otro” es decir, decir la transformación antropológica y ética de la ontología del ser, del sujeto-objeto en el caso de Hegel y del Dasein en el caso de la ontología fundamental de Heidegger. La crítica a Heidegger fue hecha por Levinas, en su tremendo libro “Totalidad e infinito” ensayo sobre la exterioridad el cual influirá mucho a Dussel pero que al mismo tiempo superara radicalizando el problema de la alteridad ya que según Dussel el problema del otro en Levinas es aún abstracto.
Nos dice Dussel:
Levinas habla siempre del otro como lo «absolutamente otro». Tiende entonces hacia la equivocidad. Por otra parte, nunca ha pensado que el otro pudiera ser un indio, un africano, un asiático. El otro, para nosotros, es América latina con respecto a la totalidad europea; es el pueblo pobre y oprimido latinoamericano con respecto a las oligarquías dominadoras y sin embargo dependientes. El método del que queremos hablar, el ana-léctico, va más allá, más arriba, viene desde un nivel más alto (aná-) que el del mero método dia-léctico
La realidad en la cual se encuentra Dussel le brinda las condiciones de poder ejercer y radicalizar las categorías de Heidegger y Levinas, ya que aquellos presos de su eurocentrismo han pensado el mundo siempre partiendo del cogito conquistador el cual viene desde la duda cartesiana con la cual la modernidad europea conquistará y aplastara América. Es pensar analéctico porque parte del rostro del otro, del otro que sufre, y lo incluye. Para el método dialéctico el problema de la alteridad y la otredad se evapora en los marasmos de la “totalidad”
En ese sentido la ética y filosofía de la liberación junto con el método analéctico son los presupuestos teóricos para la superación ontológica y epistemológica de la totalidad, de la totalidad a la cual nos tienen acostumbrados las filosofías europeas en las cuales el problemas del otro y en este caso el latinoamericano es visto como de forma cósica como objeto desde el mismo momento de la conquista y colonización española en América. La analectica es la superación de la totalidad establecida de la lógica de los sistemas dominadores (Touraine). La filosofía de la liberación y el pensamiento Latinoaméricano avanza en la tradición de que comenzaron los socialistas utópicos, Marx, la escuela de Frankfort al poner la alteridad desde la dominación y opresión total con lo cual se funda una verdadera antropología de la liberación.
Este nuevo proyecto de liberación y de alteridad infinita, de inclusión del otro oprimido es uno de los grandes aportes de la filosofía latinoamericana al pensamiento universal donde la liberación supone el momento de aceptación de lo nuevo y la ontología totalitaria supone precisamente la negación de lo nuevo, de lo otro que está surgiendo y que desea entrar en la historia como lo otro negado. En ese sentido el método analéctico y la filosofía de la liberación como proyecto ético tiene en frente uno de los proyectos más ambiciosos de des -totalización de la totalidad, el primer movimiento liberador, y la búsqueda de un hombre-mujer nuevos, que sepan escuchar la voz interpelante del otro.
Como la manifestación histórica jamás será total ya que lo histórico-social o el campo de los social-histórico es el campo de la creación genuina e infinita de posibilidades, podemos concluir que la analectica y la filosofía ontológica de la alteridad son solamente un momento del gran curso accedente del pensamiento por buscar formas de liberación de toda esclavitud histórica.
Honduras, un país atrasado y golpeado por las lógicas dominadoras, en el cual la filosofía, o la filosofía como creación genuina es casi inexistente, donde lo que existen son profesores de filosofía pero no pensadores, el estudio y el conocimiento de pensadores como Heidegger, Levinas, Ricoeur, Dussel, Castoriadis es de suma importancia. Sobre estos dos pensadores tengo pensado hacer un trabajo comparativo ya que ambos han intentado pensar la realidad histórico-social desde sus magmas constitutivos.
Tegucigalpa, 14 de febrero de 2014
Bibliografía.
La superación de la ontología dialéctica. Enrique Dussel
Filosofía de la liberación. Enrique Dussel
Para una ética de la liberación latinoamericana. Enrique Dussel.
La filosofía de Emmanuel Levinas. Metafísica, estética y ética. Daniel Salvatore Schiffer