Por Dan Martin
Kuala Lumpur/AFP
La búsqueda del avión de Malaysia Airlines se extendió al Océano Índico este viernes, a raíz de nuevas informaciones citadas por la Casa Blanca que apuntan a que el aparato continuó volando varias horas después de desaparecer de los radares, hace seis días.
«Según entiendo, en base a información nueva que no es necesariamente concluyente pero es información nueva al fin y al cabo, puede abrirse una zona de búsqueda en el Océano Índico», declaró en Washington el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney.
La marina estadounidense ordenó a uno de sus buques y a un avión de reconocimiento que se dirijan a esa zona, dijo a la AFP un responsable de la Armada estadounidense.
«El ‘USS Kidd’ transita por el Estrecho de Malaca en singladura hacia el Océano Índico», declaró el jueves este responsable, refiriéndose a uno de los grandes buques destructores de su marina, que participa en las tareas de búsqueda junto al «USS Pinckney». Ambos buques estaban hasta ahora desplegados en el Golfo de Tailandia.
Casi una semana después de su desaparición, se mantiene el misterio más absoluto sobre la suerte del vuelo MH370, que relizaba el trayecto Kuala Lumpur-Pekín, con 239 personas a bordo de varias nacionalidades, la mayoría (153) ciudadanos chinos.
La búsqueda se concentró en un principio en el Mar de China Meridional, al este de Malasia, sobre parte de la ruta que debía recorrer el Boeing 777. La última posición conocida del avión antes de desaparecer de las pantallas de los radares se sitúa a medio camino entre las costas de Malasia y Vietnam.
Sin embargo, según el Wall Street Journal y la cadena de televisión ABC, los investigadores creen que el avión continuó volando durante cuatro horas, tras haber desaparecido de las pantallas de radar una hora después de despegar de Kuala Lumpur.
La sospecha se apoya en una señal automática transmitida vía satelital por el avión durante cuatro horas tras la desaparición. Estos sistemas se conectan a uno o a varios satélites, según la fuente.
Si efectivamente continuó volando durante ese tiempo, el avión pudo recorrer 3.500 kilómetros suplementarios y alcanzar el Océano Índico, Pakistán o incluso el mar de Arabia.
El gobierno malasio está examinando estas informaciones, indicó a la AFP un responsable de las operaciones de búsqueda, sin precisar más. De momento se ignora si el país va a desplegar medios de búsqueda en esa zona del Índico.
El jueves, las autoridades malasias desmintieron informaciones del diario Wall Street Journal, que sostenía que los motores Rolls Royce del avión siguieron enviando señales a tierra cuatro horas después de perder contacto con el control aéreo. Luego, el diario precisó que las señales enviadas no provenían de los motores Rolls Royce.
El avión se volatilizó una hora después de haber despegado el pasado sábado a las 00H40 hora local de Kuala Lumpur. Las condiciones climáticas eran buenas y no se recibió ninguna señal de alerta.
La desaparición del Boeing 777 hace seis días tiene perplejos a expertos y autoridades. Mientras tanto han surgido diversas hipótesis más o menos razonables, desde una explosión a bordo hasta un secuestro, pasando por problemas técnicos, un ataque con un misil e incluso el suicidio del piloto. El aparato, en cualquier caso, es uno de los más seguros del mundo.
Hasta el jueves, la zona rastreada por decenas de aviones y buques enviados por más de diez países cubría cerca de 27.000 millas náuticas, es decir unos 90.000 km2, la superficie de Portugal. A ese área se añade ahora una parte del Océano Índico.