Diario Co Latino 134 años comprometido con usted
Artículos relacionados
@caricheop
El proyecto intercambio de experiencias y técnicas para la implementación del Teatro Infantil La Colmenita, pills junto con el grupo de niñas y niños cubanos, site debutará en el Teatro Nacional de San Salvador con la obra musical: “La Cucarachita Martina pide la Convivencia y la Paz”.
El proceso de formación y montaje de la obra es dirigido por las especialistas cubanas, ask Lisbel Arrastía y Patricia Gómez Wong, expertas en programas de arte social para la niñez y la juventud.
Ambas trabajan con el elenco salvadoreño, integrando por niñas y niños del Coro Presidencial para el Buen Vivir, el grupo infantojuvenil El Mozote, el grupo de Danza de la Casa de la Cultura de Zacatecoluca y la orquesta infantojuvenil de la Casa de la Cultura de Sonzacate. En total serán 144 participantes que se unirán en el escenario con un elenco cubano de 20 niñas y niños.
El público en general podrá disfrutar del estreno de la obra musical “La Cucarachita Martina pide la Convivencia y la Paz”, este próximo 29 de enero a las 10:00 a.m. y 5:00 p.m., en la Gran Sala del Teatro Nacional de San Salvador. El espectáculo también llegará al Teatro Nacional de Santa Ana, el 30 de enero, a las 4:00 p.m. y el 31, al Teatro Nacional de San Miguel, a las 3:00 p.m.
Arte y valores
La Colmenita nació en Cuba, en 1990, y busca fomentar valores humanos a través de la creación artística, en especial el teatro, integrar a la niñez y a la adolescencia al disfrute del arte, buscando la unidad de lo diverso para alcanzar su crecimiento personal. A la vez de demostrar con un enfoque interdisciplinario, el camino de la cultura y las arte escénicas.
Para ello, han implementado una metodología de gran éxito, al grado de ser nominada como Embajadora de la Buena Voluntad por el Fondo para la Infancia de Naciones Unidas (UNICEF). Hay Colmenitas en Cuba, México, Panamá, Nicaragua, Colombia, Argentina, Venezuela, España, Canadá y ahora El Salvador.
La Embajadora de Cuba en El Salvador, Ileana Fonseca, explicó que “el proyecto salvadoreño se enmarca en el Convenio Interinstitucional en materia de intercambio cultural con el Ministerio de Cultura de Cuba. Se estima que, con una inversión de aproximadamente $271 mil, se beneficiará a 430 jóvenes y adolescentes”.
Además, el proyecto La Colmenita El Salvador incluye a niños y jóvenes, entre 5 y 17 años, y es implementado a través de la Red de Casas de la Cultura que procuran desarrollo social mediante el arte y los 10 municipios del país que forman parte del “Plan El Salvador Seguro” que busca la reducción de la violencia implementado por la Presidencia de la República.
Estos municipios son: San Salvador, Santa Ana, Soyapango, Mejicanos, Zacatecoluca, Jiquilisco, San Juan Opico, Sonsonate, San Vicente y San Miguel, a los que se les sumarán Dulce Nombre de María, Sonzacate, Chapeltique y el caserío El Mozote y el Coro de Casa Presidencial.
César Pineda, director de Casas de la Cultura de SECULTURA, explicó que “la iniciativa arrancó en noviembre de 2015, con la llegada de una comitiva de expertos cubanos y esta cerca de concluir una primera fase en el país con un diagnóstico, la socialización de la metodología y los talleres artísticos con la participación de cuatro grupos focales establecidos: niñez del Coro Presidencial del Buen Vivir, Casa de la Cultura de Zacatecoluca, de la Casa de Cultura de Sonzacate y del Caserío El Mozote, Meanguera y Morazán”.
La segunda fase del proyecto iniciará en marzo de esta año y tomará como base los resultados del diagnóstico. Asimismo, se le dará continuidad y asistencia técnica a los elencos infantojuveniles del Coro Presidencial para el Buen Vivir y las Casas de la Cultura de Zacatecoluca, Sonzacate y el Mozote. También, se capacitará a directores de las Casas de la Cultura, promotores culturales y artistas en la metodología de La Colmenita y payasos terapéuticos, para garantizar la continuidad y el seguimiento de los proyectos de cada municipio.
Para el Gobierno de El Salvador, la experiencia del programa se convierte en una herramienta adecuada para unificar esfuerzos en el combate de la violencia a través de la prevención, con la generación de espacios de convivencia y oportunidades para la niñez y la adolescencia.
Debe estar conectado para enviar un comentario.