Estrasburgo/AFP
El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, subrayó este miércoles que la UE necesita «un cuartel general único» en materia de defensa y urgió a avanzar hacia una fuerza conjunta europea, en su discurso anual ante la Eurocámara.
«Sin estructura permanente no podemos actuar con eficacia. Será necesario que tengamos un cuartel general único en la UE (…) y orientarnos hacia recursos militares comunes» y complementarios a la OTAN, aseguró Juncker.
«Una mayor defensa europea no significa menos solidaridad transatlántica», subrayó el presidente del ejecutivo europeo, máxime cuando 22 de los 28 países de la UE son miembros de la Alianza Atlántica.
La jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, es la principal impulsora, a través de su plan Estrategia Global, de más inversión en materia de seguridad y defensa para «hacer frente a las crisis exteriores» y «garantizar la seguridad de Europa».
Aunque a principios de septiembre Mogherini descartó una ejército común en un futuro próximo, abogó en una entrevista reciente al diario La Repubblica por la creación de un cuartel general civil y militar común europeo en Bruselas, donde la OTAN también tiene su sede.
La ausencia de cooperación militar cuesta a Europa «entre 20.000 y 100.000 millones de euros por año», lamentó Juncker, quien propondrá «antes de finales de año» crear «un fondo europeo de defensa» para «estimular activamente la investigación y la innovación» en la industria.
El presidente del ejecutivo europeo defendió, asimismo, las acciones puestas en marcha estos últimos meses para proteger las fronteras exteriores de Europa, en un contexto de crisis migratoria. «Pero aún queda trabajo».
«Debemos saber qué individuos atraviesan nuestras fronteras, por lo que defenderemos nuestras fronteras con la ayuda de la nueva agencia de guardias fronterizos y guardacostas europeos», creada recientemente para remplazar la agencia Frontex.
La UE reforzará además antes de finales de año las modalidades de control de las personas que entren o abandonen territorio europeo y propondrá «un sistema automatizado para determinar quién será autorizado a viajar a Europa», añadió.
La cuestión de la seguridad centrará la reunión el viernes de los 27 mandatarios europeos en Bratislava, sin la primera ministra británica Theresa May, para reflexionar sobre el futuro de una Europa debilitada por el Brexit, la crisis migratoria y los atentados yihadistas.
La salida de Reino Unido representa también la marcha de una de las principales potencias nucleares y militares de la UE, con derecho de veto en el Consejo de Seguridad de la ONU, pero también de uno de los países más reticentes a avanzar hacia un ejército común.