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@RosmeriAlfaro
El diálogo social y debate nacional son indispensables para la discusión de una reforma al Sistema de Ahorro de Pensiones (SAP), las cuales lamentablemente siempre han sido construidas a través de correlaciones ideológicas.
Para el Sindicato de Trabajadores y Trabajadoras del Instituto Nacional de Pensiones de los Empleados Públicos (SINTINPEP) es necesario que se tome en cuenta la voz de los trabajadores, empleadores, y de “sectores ampliamente excluidos como el mal llamado informal”, para encontrar una solución a largo plazo. El gobierno salvadoreño ha hecho público, en reiteradas ocasiones, su interés por buscar todos los mecanismos de solución para el problema previsional, uno de ellos es dialogar con todas las fracciones en la Asamblea Legislativa.
Patricio Pineda, representante del SINTINPEP, afirmó que la experiencia que han tenido señala que los diálogos entre la Comisión de Hacienda son estériles, ya que en el parlamento solo se piensa en votos. “Debe ser un debate nacional, si no, no vamos a resolver nada. El diálogo entre diputados y gobierno es porque saben que esto ya está por reventar. Las medidas para salvaguardar el problema a corto plazo ya se dieron”, señaló.
El ejecutivo acusa al partido de oposición de mantener un bloqueo sistemático al negar, entre otras cosas, la aprobación de emisión de bonos por $650 millones, lo cual ha agravado las finanzas del Estado en los últimos meses.
La última semana de julio la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, invalidó las reformas a la Ley del Sistema de Ahorro para Pensiones para pasar de 45% a 50% el techo del Fideicomiso de Obligaciones Previsionales (FOP) y darle mayor capacidad de préstamo al gobierno para el pago de los Certificados de Inversión Previsional (CIP).
El movimiento popular indicó que el aumento, aunque no era lo ideal, a corto plazo era “un mal necesario” porque permitiría la disponibilidad de recursos para pagar la pensión de los empleados del Instituto Nacional de Pensiones de los Empleados Públicos (INPEP), Unidad de Pensiones del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (UPISSS) y AFP.
En cuanto a la medida de la Sala, expuso que es inhumano e irresponsable dejar sin comida a casi 200 mil ancianos del país.
Diferentes sectores han presentado sus propuestas de reformas al SAP, entre ellas está la del movimiento popular; la única que comprueba una ampliación de la cobertura en el primer año de ejecución. Para ahogar en un tiempo determinado la presión fiscal del país recomiendan aprobar un hibrido transitorio.
Pineda expuso que están de acuerdo en que a la propuesta se incorporen medidas que a corto plazo desahoguen las finanzas públicas, recuperen el tema solidario, que exista sostenibilidad para pagar las pensiones y respete el derecho de elección de los y las trabajadoras.
La propuesta de la clase trabajadora propone la creación del Instituto Nacional Autónomo de Previsión Social (INAPS) con la participación de una tripartita (cotizantes, pensionados y sector independiente), uno de los aspectos novedosos es que la propuesta protege a las mujeres en sus meses de posgestación y al quedar viudas.
Gobierno garantiza pago de pensiones
Según el gobierno salvadoreño el pago de las obligaciones previsionales para los pensionados en el Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) y el INPEP, así como las de los denominados “optados”, que son aquellos que cotizaban en el ISSS o INPEP pero que se trasladaron a una AFP, está garantizado para agosto y septiembre.
“Nos hemos reunido con la Superintendencia del Sistema Financiero para que, aplicando la ley, garantice de que las AFP (Administradoras de Fondos de Pensiones), tanto Crecer como Confía, también puedan ser parte de esta garantía de pagar agosto y septiembre” dando un margen de dos meses para conseguir la aprobación de una reforma integral al sistema previsional, indicó el Presidente Salvador Sánchez Cerén hace algunos días. La medida brindaría una solución a largo plazo al problema generado por el mal proceso de privatización al que fue sometido por el gobierno del partido ARENA en 1996. Tras la privatización, el Estado ha aportado más de $400 millones anuales en los últimos años, obtenidos mediante endeudamiento. De acuerdo con la Presidencia hasta la fecha ha sido imposible lograr una apertura del partido de derecha por la vía del diálogo político, por lo que ha optado por buscar acercar posiciones con las administradoras de pensiones en la búsqueda de consensos para solucionar el problema previsional. El pasado lunes el mandatario salvadoreño se reunió con directivos de las AFP Confía y Crecer, “en el encuentro las partes coincidieron en la necesidad de encontrar una solución al problema que enfrenta el actual sistema y garantizar el mayor beneficio a los pensionados y cotizantes”. Algunas de las medidas será contratar a expertos que elaboren el estudio actuarial de los cotizantes y pensionados del sistema, con el objetivo de manejar cifras de consenso para avanzar en la reforma.
