Por Yussel González
México/AFP
La economía mexicana resistió mejor de lo previsto ante la incertidumbre provocada por los primeros 100 días de Donald Trump en la presidencia de Estados Unidos: su Producto Interno Bruto (PIB) creció 0,6% en el primer trimestre.
Este dato, anunciado este viernes por el instituto nacional de estadísticas (INEGI), superó al 0,5% previsto por los analistas.
El buen resultado obedece principalmente, precisó el organismo, a un aumento de 1% en el sector servicios, que representa cerca del 60% de la actividad económica mexicana.
Sumado a un aumento del 11,2% en las exportaciones en el mismo periodo, demuestra que la economía de México resiste de momento a las dudas sobre el futuro de sus relaciones con Estados Unidos.
«Lo que anticipábamos era una caída muy importante en la inversión y en la actividad económica, y no se ha visto», explica a la AFP Carlos Serrano, economista en jefe de BBVA Bancomer.
En diciembre, Serrano preveía una recesión en México si Trump cumplía promesas electorales como abandonar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) o gravar las remesas de los migrantes para financiar su controvertido muro fronterizo.
Estados Unidos es el principal socio comercial de Méxio, al que este destina 80% de sus exportaciones. Y muchas familias mexicanas dependen de las remesas, una de las mayores fuentes de divisas del país, que en 2016 alcanzó un récord de 26.970 millones de dólares.
La Casa Blanca anunció el miércoles que, tras hablar con el presidente mexicano Enrique Peña Nieto y el primer ministro canadiense Justin Trudeau, Trump «aceptó no abandonar el TLCAN en este momento».
En su lugar, los tres países acordaron emprender lo antes posible la renegociación de un tratado que el presidente estadounidense considera desfavorable para su país.
México respira
Varios responsables de la administración Trump se esforzaron en los últimos meses por moderar el tono respecto a las relaciones con México.
En este contexto, la divisa mexicana fue recuperando terreno frente al dólar desde los casi 22 pesos por billete verde del 19 de enero, víspera de la llegada de Trump a la Casa Blanca.
A mediados de abril, el peso llegó a cambiarse a 18,5 unidades por dólar, y este viernes en la apertura se cotizaba en 18,99 dólares.
Los grandes bancos privados de México tomaron nota de las mejores perspectivas económicas: BBVA Bancomer elevó recientemente su pronóstico de crecimiento de 1% a 1,6% este año, y Citibanamex lo aumentó de 1,2% a 1,7%.
El gobierno y el Banco de México esperan que el PIB mexicano gane entre 1,3% y 2,3% en 2017.
«En tasas de crecimiento, (las exportaciones) han tenido un buen desempeño y eso ha sido en parte lo que ha ayudado a la economía», considera Carlos Capistrán, economista en jefe para México del estadounidense Bank of America Merrill Lynch.
El consumo de las familias, que mantuvo a flote la economía en los últimos dos años, también ha crecido, aunque los mexicanos enfrentan cada vez mayores niveles de inflación como fruto de la depreciación de su moneda frente al dólar.
Los precios al consumo subieron 5,62% hasta la primera quincena de abril, y los especialistas esperan que la tendencia se mantenga para llegar a 6% en los próximos meses, afectando al poder adquisitivo de las familias.
«Si bien (el consumo) va a tener un crecimiento positivo, no va a ser tan potente», considera Serrano.
Trump, el riesgo latente
Un día después de que la Casa Blanca anunciase que Estados Unidos renegociará el TLCAN con México y Canadá, Trump insistió en Twitter que su país puede abandonar el tratado comercial si no logra un «acuerdo justo». Por lo tanto, la incertidumbre persiste.
«El hecho de amenazar con la salida del TLCAN tal cual es simplemente el estilo de Trump de poner la mesa para decir ‘vamos a sentarnos a negociar pero antes déjenme decirles quién es el que manda'», considera Jonathan Heath, analista económico estadounidense afincado en México.
Y esa ambigüedad sí está teniendo impacto en las inversiones que recibe México.
Los expertos esperan que la Inversión Extranjera Directa (IED) se ubique en torno a los 21.000 millones de dólares en este año, frente a los más de 26.000 millones de dólares de 2016.
«Sigue sin pasar nada en concreto, pero la volatilidad sigue ahí», advierte Capistrán.
Ahora está por ver qué ocurrirá cuando dé comienzo la renegociación del TLCAN.