Samuel Amaya
@SamuelAmaya98
La misa de este domingo fue presidida por Guillermo Palacios, vicario de Catedral Metropolitana, quien habló a los feligreses de tener humildad en todas las situaciones de la vida, ya que así fue el señor.
El evangelio se trató precisamente de humildad, la cual se puede definir como “andar en la verdad, pues es reconocer que nosotros como humanos tenemos un cúmulo de defectos, pero también un cúmulo de virtudes”.
En ese sentido los feligreses presentaron a monseñor Romero como un símbolo de verdadera humildad porque nunca pretendió alabanzas ni premios, por alzar su voz por las víctimas y pobres, sino que hasta él entregó su vida en defensa de ellos.