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@davidmar2105
Eran las nueve con cuarenta y cinco de la mañana de un martes de abril, viagra un sol brillante y candente nos recibe al entrar a la comunidad La Iberia, purchase al oriente de San Salvador. Nos adentramos a dicha comunidad hasta llegar a la casa comunal, donde nos acogió un grupo de jóvenes residentes del lugar.
Dicha comunidad, en los últimos años ha sido estigmatizada como una de las más violentas de San Salvador, donde los cuerpos de seguridad estatales le han dado más énfasis en el tema de la represión del delito para bajar un poco el flagelo de las pandillas, pero no así se ha trabajado en el tema de la prevención o reinserción de los jóvenes habitantes del lugar.
Por ello un grupo de jóvenes externos a la comunidad llegaron desde hace siete meses insertar este tipo de programas por medio de las artes, el gancho perfecto para llegar a los adolescentes y rescatarlos de este fenómeno que ha crecido después de los acuerdos de paz.
“En este esfuerzo estamos involucrados una serie de personas que en su mayoría tiene experiencia en trabajos con jóvenes de diferentes comunidades en distintas áreas de las artes, y lo que nos incentivo fue el ánimo de cambiar la situación en la que vivimos, algo que no lo vamos a lograr solo por medio de la represión, por eso es que nosotros escogimos cambiar la situación de las comunidades por medio de las artes, porque sabemos que es lo que quieren los jóvenes, no es por imposición como se van a cambiar las cosas”, indicó Víctor Santana, impulsor de la iniciativa.
Y así iniciaron en la casa comunal un “focus group” para primeramente estudiar cómo estaba la situación en el lugar y saber a cuantos y que les interesaba aprender a un grupo de adolescentes en riesgo. Fue así como salieron muchos con el ánimo de formarse en el área del arte urbano.
Por el momento son 35 muchachos que se han adherido a este programa de prevención denominado “intervención urbana”, donde aprenden técnicas de graffitis artísticos y de big box, entre otros talleres, lo que ayuda a darle otra cara a la comunidad, pues se han trazado el objetivo, como un comienzo, de pintar las entradas con su arte y demostrar lo que verdaderamente sucede dentro de dicho recinto.
Aunque esto es opacado por los cuerpos represivos del estado, en específico de la Policía Nacional Civil (PNC) y los miembros de tarea conjunta de la Fuerza Armada de El Salvador (FAES) pues por la mismo estigmatización que hay de estos jóvenes, los miembros de dichas entidades los golpean solo por su vestimenta, y al principio por apoyar las actividades de plasmar el arte urbano.
Este problema hasta el momento ha sido controlado por parte de los impulsores de la iniciativa, quienes han logrado hacer entender a las autoridades el desarrollo de estos programas de prevención de violencia..
Además los beneficiarios dijeron que durante años no recibieron un apoyo real por parte de ninguna entidad gubernamental, ni mucho menos de la alcaldía de San Salvador, quien se debería de encargar de apoyar este tipo de iniciativas.
“La alcaldía, por medio del promotor de la comunidad quisieron hacer el “intento” de ayudarnos, pero ha sido como te ayudo una o dos semanas y me voy, aclarando que esa ayuda fue entre la comuna y las Naciones Unidas, y cuando queríamos hacer algo de arte no podíamos porque la autoridad no nos dejaba desarrollarnos por la misma estigmatización que hay del arte urbano, pero gracias a estas personas que nos vinieron a ayudar que hoy sí podemos decir que podemos salir adelante con este programa”, indicó Edgar Barrera, beneficiado con el programa.
En concreto, durante los seis años de administración del alcalde saliente, Norman Quijano, la comunidad Iberia estuvo abandonada prácticamente, pues solo entregaron instrumentos para una batucada, unos cuantos talleres y la construcción de un parque el cual hasta el momento está abandonado.
No fue hasta la pasada campaña electoral que el hoy alcalde electo por el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), Nayib Bukele, dio el apoyo al programa de intervención urbana, el que continuará como parte de su política de seguridad que promociono durante la contienda.
Es de recordar que una de las apuestas de Bukele es la creación de la Secretaría Municipal de Cultura, la cual contará con un fondo anual de 2 millones de dólares para el apoyo de estos artistas urbanos que buscan sobresalir en medio de una problemática social que ha tomado auge en los últimos años.
Según este grupo de jóvenes, será de gran ayuda y dicen creer en el proyecto del también, hasta hoy, el alcalde de Nuevo Cuscatlán, pues lo demostró durante su campaña y esperan que siga durante los próximos tres años de gestión.
“Yo no veo expectativas a futuro, ya lo estoy viviendo como tal. El tipo (Bukele) no se ha sentado aún en la silla y su gente ya está trabajando en las comunidades y está apoyando a estas organizaciones de jóvenes desinteresados para que los que estamos en peligro de caer en la violencia no lo hagamos y que los cambios de mi colonia se den”, acotó Barrera.
Pero esto no solo se ha puesto en práctica en la comunidad Iberia, ya que el alcalde electo ha apoyado a los iniciadores de intervención urbana para extender el programa a 35 comunidades con más riesgo de violencia en San Salvador.
Aclararon que no forman parte de ningún comando de campaña, ni mucho menos integran alguna organización partidaria, y aseguraron que el alcalde electo fue quien los llamó a que participaran en este proyecto para iniciar con su proyecto de prevención.
Los jóvenes de la comunidad dijeron tener grandes expectativas con dicho proyecto, por ello les piden a las autoridades como el ministerio de seguridad para que detengan la represión por parte de la PNC y la FAES y se adhieran a este tipo de programas, los cuales son una esperanza para algunos jóvenes para vivir en paz.
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