Roma/dpa
La Juventus derrotó con claridad 2-0 a la Lazio en la final de la Copa Italia de fútbol y se aseguró el primero de los tres títulos a los que aspira en este final de temporada, a la espera de coronarse en la Serie A la próxima fecha y de disputar el 3 de junio la definición de la Liga de Campeones ante el Real Madrid.
El lateral brasileño Dani Alves, uno de los puntos altos de la Juve, abrió el marcador a los 12’ del primer tiempo, mientras que el defensor Leonardo Bonucci aumentó la cuenta 13 minutos después para decretar el marcador definitivo.
El equipo de Massimiliano Allegri, pragmático, definió el encuentro antes de la media hora, aunque la historia pudo haber sido distinta. Previo a que los turineses se adelantaran, el senegalés Keita Balde estrelló un balón en el palo.
Pero no hay que perdonar a esta Juventus, que hace de la efectividad un mantra.
La Juve ya avisaba con remates del argentino Paulo Dybala y de su compatriota Gonzalo Higuaín, pero en ambos el albanés Thomas Strakosha respondió con buenos reflejos. Strakosha no pudo evitar, sin embargo, el gol de la conexión brasileña: una pelota cruzada de izquierda a derecha por Alex Sandro que encontró a Alves perfectamente ubicado, a espaldas de la defensa romana, puntual para abrir el marcador.
A partir de allí, la “Vecchia Signora” comenzó a construir el partido que más le interesa, la situación en la que está cómodo. Antes de echar el cerrojo, el campeón aumentó el marcador.
Ocurrió tras un córner que llegó al corazón del área de la Lazio, a los 25’, y que Bonucci empujó al arco defendido de Strakosha. A partir de ahí, no hubo mucho más partido que el que decidiera la sólida Juventus.
La Lazio, con honor, impulsada por sus aficionados, intentó acercarse, y hasta pudo descontar al arranque del segundo tiempo cuando Ciro Immobile cabeceó pero el portero brasileño Neto, de gran actuación reemplazando a Gianluigi Buffon, sacó la pelota en la raya.
Neto debió responder luego ante su compatriota Felipe Anderson y nuevamente ante Immobile para mantener el arco en cero, mientras que Strakosha volvió a salvar a su equipo al sacarle una pelota de gol a Higuaín.
De ahí en más, la Juve prefirió defender bien la diferencia, administrar el partido y ceder la iniciativa a los romanos. Pero era un trámite. Los de Allegri habían liquidado el partido pronto y no dieron a la Lazio demasiadas posibilidades de volver a él, además de contar con suerte de campeón.
En rigor, ya se vuelve una costumbre que la Juventus gane la Copa, y que además lo haga frente al cuadro romano, pues lo derrotó 2-1 en la final de 2015.
Por lo demás, los “bianconeri” podrían sumar por tercera temporada consecutiva el doblete de Liga y Copa si este fin de semana se coronan en la Serie A por sexta vez en línea, lo que sería otro récord.
El 3 de junio, además, podrían llegar al triplete si vencen al Real Madrid en la final de la Champions en Cardiff.
Si lo logran, se sumarían al selecto grupo de siete equipos que en una misma temporada lograron Liga, Copa y Liga de Campeones.