Yaneth Estrada
@caricheop
El secretario general del Sistema de Integración Centroamericana (SICA) Vinicio Cerezo, de paso por El Salvador, consideró que “los Estados Unidos deberían dejar de ver la migración centroamericana como un problema de seguridad, y verlo como un problema social”.
Desde abril de este año, bajo la política de “Tolerancia Cero”, todo migrante indocumentado es considerado un delincuente y se procesa judicialmente como tal, aunque no tenga antecedentes penales, por eso los niños no pueden seguir junto a ellos y son separados. En total fueron cerca de 2,300 niños afectados (462 de Guatemala y 50 salvadoreños) y que permanecen bajo custodia del Cuerpo de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP).
La ONU, CIDH y UNICEF rechazaron estas medidas y reclamaron que este ambiente podía traumatizar a los niños. También las ex-primeras damas Michelle Obama, Laura Bush y Hillary Clinton reaccionaron ante la política de separación de familias.
“La idea es enfrentar un problema (de la migración centroamericana) que nos afecta a todos y el planteamiento está dirigido a eso mismo, a que con Estados Unidos busquemos un planteamiento legal para que se pueda controlar la migración de manera permanente”, reafirmó.
Pronunciamiento y unidad
Tras la 51a Asamblea General del organismo regional celebrada la semana pasada en República Dominicana, Vinicio Cerezo aclaró que hubo un pronunciamiento general del SICA. Además, recientemente, se discutió la necesidad de enfrentarlo como un problema de desarrollo, “y en ese
sentido lo que hemos propuesto es que haya una participación conjunta de todos los presidentes para hacer un frente común”, manifestó.
Cerezo detalló que pedirán a los Estados Unidos una solución razonable, “que nos sentemos a discutir una política migratoria que tome en cuenta nuestros procesos de cambio y desarrollo, que no va a resolver el problema y podría tardar algunos años”, recalcó el también expresidente de Guatemala y abogado.
Asimismo, comentó que podrían buscar un acuerdo migratorio para que, como se ha establecido en otros países como El Salvador y Guatemala, donde se extendieron permisos temporales de trabajo a México, se pueda superar esta crisis humanitaria.